Malestar por volver a unir los bonos al Black Friday y la campaña Navidad

La campaña de Bonos al Consumo vuelve a su cita casi tradicional. La iniciativa arrancó en 2020 por la pandemia y vuelve a hacerse fuera de valle de consumo en el comercio y a las puertas de la época en la que más compras se realizan sin necesidad de estímulo ninguno. Al menos así lo ven los comerciantes de Burgos, principales beneficiarios de esta subvención a los consumidores.

«No nos gustan las fechas porque es un problema estar en pleno Black Friday, ¿te sumas o no te sumas? y está muy próximo a Navidad», explica la presidenta de la Asociación de Comerciantes Centro Burgos, Patricia Gil. En la misma línea los comerciantes de Zona G porque «están en medio de una campaña de oferta como el Black Friday y en Navidades los productos ya se venden solos».

La campaña de Bonos al Consumo, que arrancó en octubre de 2020 aún con mascarillas y restricciones de movimiento y acceso a espacios públicos cerrados. Se mantiene año tras año aunque en las últimas ediciones las fechas no han gustado a los profesionales del comercio minorista, hay cierto desapego desde los negocios de hostelería que cada vez son menos, y entraron y salieron en un suspiro los gimnasios.

Este año los bonos se podrán adquirir por parte de los ciudadanos a partir del próximo martes, 29 de octubre. Se emitirán un total de 350.000 que se podrán consumir en un variado sector del comercio con hasta 15 tipos de productos. Se reducen a 50.000 los que se podrán distribuir entre los bares, cafeterías y restaurantes adheridos a la campaña por el momento.

Cada ciudadano podrá retirar un máximo de 10 bonos. Cada uno tiene un valor de 10 euros donde seis los aporta el consumidor y cuatro los subvenciona el Ayuntamiento de Burgos que destina 1,5 millones a esta campaña divididos entre los 1,3 millones para comercio y 200.000 para hostelería.

Estos vales se podrán canjear entre el 29 de octubre y el 10 de diciembre algo que no gusta a los comerciantes porque incluye el Black Friday (este año es el viernes 29 de noviembre e implica a los días previos). Además, se incluye también el puente de la Inmaculada que es cuando arranca la campaña navideña. «Hasta que no se ha hecho público desconocíamos si se iban a hacer o no porque nadie se ha reunido con nosotros para al menos saber cuando podemos disponer de género o como organizar los turnos de los trabajadores», señala Gil. En la misma situación se expresa el técnico de Zona G, Borja Ruiz, que reconoce que «no se ha tratado nada con nosotros sobre los bonos».

Ambos coinciden que la época idónea para este tipo de promociones que incentiven el comercio es el mes de octubre, antes del conocido como Viernes Negro para que «cada comercio pueda plantearse si necesita adherirse al Black Friday o no y para enlazar una campaña con otra hasta el pico de consumo de Navidad», señalan. Apuntan, además, que en las bases de los Bonos no se ha incluido la exención de aplicar a otro tipo de descuento lo que puede ser un problema para el comercio porque «no sabemos si se puede limitar o no la unión de dos promociones en una misma compra», lamentan.

Como aspecto positivo de hacer coincidir los bonos con una época de consumo disparado es que con «estas campañas son una oportunidad para que el público que no nos conoce o los que solo van las grandes superficies nos conozcan porque somos un comercio con un buen producto, con un buen servicio y una atención personalizada», remarca Patricia Gil.