Más de mil casos activos en VioGén en Burgos, un 22,5% más que el año pasado

El pasado mes de junio, se contabilizaron por primera vez en Burgos más de un millar de casos activos dentro del Sistema de Seguimiento Integral en los casos de Violencia de Género (VioGén). Cifra récord no solo en la provincia, sino en toda Castilla y León, donde el número de solicitudes de amparo por parte de las víctimas aumenta paulatinamente.

Se cerró septiembre con 1.078 expedientes todavía abiertos en Burgos, un 22,5% más en relación al ejercicio anterior. Desde que se puso en marcha este protocolo, se han gestionado más de 6.000 casos y atendido a 5.381 mujeres. Los datos, facilitados por el Ministerio del Interior, reflejan además que Burgos es el territorio de la Comunidad en el que más seguimientos se realizan. No desde ahora, sino desde hace tiempo. En cualquier caso, el mes pasado había 4.847 intervenciones activas. La media, en base a esta cifra, se sitúa en 539 casos por provincia.

Dentro de ese 22% de expedientes VioGén del total autonómico que todavía seguían su curso en Burgos el mes anterior, 398 fueron considerados de riesgo no apreciado y 478 bajo. Asimismo, se determinó que 180 de ellos requerían un nivel de protección medio y 22 alto. Sea como fuere, conviene reseñar que, desde marzo de 2019 hasta la actualidad, se han tramitado 537 casos de especial relevancia. De un año a otro, eso sí, se han sumado 140 nuevos. Hablamos, por lo tanto, de un aumento interanual superior al 35%.

Cuando se habla de víctimas, no solo se ha de tener en cuenta a todas aquellas mujeres que sufren violencia machista. También están los menores a su cargo. Y requieren, como es lógico, una protección especial frente a los agresores. En este caso, la estadística de Interior recoge la asistencia, desde marzo de 2019, a 85 niños y adolescentes en situación de riesgo -dos menos que en Cantabria- y 112 vulnerables.

Siguiendo con los casos de especial relevancia, la gran mayoría (346) presentaban un nivel de riesgo alto mientras 69 se situaban en nivel extremo y 122 en medio. Por su parte, 18 de los menores asistidos se hallaban en un contexto de peligrosidad extrema.

Por edades, el perfil mayoritario de las víctimas se mantiene en un rango de edad entre 31 y 45 años. Dentro de este apartado, VioGén culminó septiembre con 473 casos activos, 12 de ellos en un nivel de riesgo alto.

El segundo grupo más afectado por la lacra de la violencia machista es el de mujeres entre 46 y 64 años. Con 322 expedientes abiertos el mes pasado y más de 2.300 víctimas desde que se puso en marcha el sistema, predominan los casos de riesgo no apreciado y bajo, si bien es cierto que 60 de las usuarias aún permanecían en septiembre en niveles de peligrosidad media y alta.

Las menores de edad continúan siendo minoritarias, con cinco casos activos y cinco cerrados con anterioridad. También las mayores de 64, con una veintena de seguimientos en marcha aunque ningún susceptible de riesgo extremo. Mientras tanto, las mujeres de entre 18 y 30 años constituyen un grupo cada vez más numeroso, con 256 casos activos el mes anterior y un total de 714 víctimas registradas en el histórico estadístico.

Los datos recabados mes a mes no invitan al optimismo sino más bien todo lo contrario. No obstante, las fuerzas y cuerpos de Seguridad llevan años combatiendo la violencia de género mediante una mayor dotación de medios tanto humanos como materiales. Además, el hecho de que las cifras vayan en aumento se debe, fundamentalmente, a que las víctimas denuncian cada vez más. Así lo han puesto de manifiesto en numerosas ocasiones tanto el subdelegado del Gobierno en Burgos, Pedro de la Fuente, como los máximos responsables de la Policía Nacional y de la Guardia Civil, quienes no dudan en hacer reiterados llamamientos a la colaboración ciudadana para evitar este tipo de episodios.

También adscrita a VioGén a través de su Unidad de Atención a la Familia y Mujer (UFAM), la Policía Local de Burgos gestionó el pasado año 136 seguimientos. Según se refleja en su memoria, los agentes que operan dentro de este departamento llevaron a cabo alrededor de 4.000 intervenciones. Más de la mitad fueron llamadas telefónicas, aunque también se efectuaron cerca de 800 entrevistas con víctimas y presuntos agresores, 791 valoraciones de evolución de riesgos y 155 acompañamientos.