Alerta en la construcción de Burgos. «No hay relevo generacional en la obra»
En las reformas ya «ralentiza el trabajo alargando plazos de entrega». En los pueblos «la falta de contratistas es muy acusada». «No interesa aprender un oficio aunque sepan que tienen trabajo para toda la vida»
La vivienda alcanza precios cada vez más altos. La construcción nueva y las reformas crecen al albur de la demanda. Pero el círculo se corta en un punto clave. No hay relevo generacional en los oficios. «Desde hace siete años se ha detectado una pérdida constante de masa laboral que no se recupera», explica el presidente de la Asociación de Empresas de Reformas de Burgos, Vicente García.
Cuesta encontrar albañiles, fontaneros, electricistas, carpinteros, herreros, pintores... «No hay aprendices de estos oficios, hay pocos profesionales y los que hay están muy cerca de la jubilación», señala. Tal es así que la situación ya afecta a la ejecución de los trabajos de rehabilitación o reforma. «La situación empieza a ser crítica, no llega a paralizar proyectos pero sí que se ralentizan, empezamos a no poder entregar en los plazos habituales los trabajos porque cuesta encontrar profesionales», señala.
Este panorama llega a comprometer el proceso desde la concepción de los planos. «Escayolistas o yeseros prácticamente no existen, así que al diseñar el proyecto la situación te obliga a poner pladur, pero es que hay problemas para encontrar fontaneros, electricistas, pintores... Trabajo hay pero no quién lo haga», explica el presidente del Colegio de Arquitectos de Burgos, Javier Achirica.
Y la situación se agrava en el medio rural. «Hoy es muy difícil hasta encontrar contratistas que te hagan la obra en el medio rural son pocas las empresas que hay y los encargados están a las puertas de la jubilación», remarca Achirica. Esta situación obliga en muchos casos a desplazar cuadrillas de obra de la capital al medio rural lo que encarece al final el proceso de construcción.
Las cifras reflejan esa situación crítica del sector. Según la Fundación Laboral de la Construcción en Castilla y León el 35% de los trabajadores del sector tiene más de 50 años desde los puestos más cualificados a los oficios. Sólo el 9%, y son cargos directivos o de diseño, es menor de 35 años.
La construcción emplea en la provincia a 6.834 trabajadores por cuenta ajena y cuenta con 3.452 autónomos. En total 1.139 empresas están operativas en la ejecución de obras ya sean de reforma o rehabilitación, nueva construcción o los proyectos de obra pública. Y mientras las contrataciones de albañiles y peones cae en un 8% y en un 11% en septiembre porque no hay personal.
Hay trabajo
«A los jóvenes ahora mismo no les interesa aprender un oficio de la construcción aunque sepan que tienen trabajo para toda la vida», explica García. Por eso Achirica ve incomprensible que «jóvenes que ni estudian ni trabajan no se planteen aprender un oficio de este tipo que tiene trabajo e ingresos asegurados». El reto es volver a hacer atractivo un sector denostado especialmente tras la crisis de la burbuja inmobiliaria completamente superada. No gustan horarios, trabajar a la intemperie, el esfuerzo que requiere...
La construcción mira a la contratación en origen de población inmigrante, aunque para empresas pequeñas se ve inviable por la necesidad de conocer el nivel formativo o de conocimiento de un oficio que en la distancia «no se puede evaluar como sí se puede con un transportista si tiene carnet de camión o no», señalan. «El único relevo que se ve en la construcción son personas que han venido de fuera, muchos han montado sus pequeñas empresas, ya tenían experiencia en sus países de origen pero se han adaptado a las formas de hacer aquí y no les falta el trabajo», señala Achirica.