CENTRAL NUCLEAR DE GAROÑA
La plantilla pide a Obama que convenza a Zapatero de que no clausure la central
Convocan esta tarde una manifestación en Miranda
G. DE LA IGLESIA / AGENCIAS / Miranda
Los empleados de la central nuclear de Garoña entregaron ayer una carta en la embajada de Estados Unidos en la que piden al presidente norteamericano, Barack Obama, que le traslade al jefe del Ejecutivo español, José Luis Rodríguez Zapatero, «su apuesta por el mantenimiento» de las centrales.
Además, la supervisora de la sala de control de la central de Garoña, Cristina Herrero, en calidad de representante de los trabajadores, invitó a Zapatero a visitar la central para que desaparezcan «sus miedos» a estas instalaciones y para que escuche a los empleados antes de tomar una decisión.
Herrero, en declaraciones a los medios de comunicación que recoge Efe aseguró que para los trabajadores la seguridad de la central es «lo más importante» y precisó que ésta «está garantizada».
En este sentido, dijo que la central mantiene una «total transparencia» ante el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN), órgano dependiente del Ministerio de Industria.
En la misiva dirigida al presidente Obama, los trabajadores celebran la decisión de éste de combinar las centrales nucleares con las de energías renovables y con el resto de fuentes de energía.
Con este fórmula, los representantes de la central de Garoña creen que Estados Unidos se beneficiará a medio y largo plazo.
Por ello, instan a Zapatero que tome una decisión de acuerdo con el informe favorable emitido por el CSN, en el que se acredita que la central nuclear de Garoña puede seguir en operación hasta el 2019, alargando su vida útil hasta los 48 años.