Acaban las obras del primer tramo de la carretera de Bardauri

GABRIEL DE LA IGLESIA / MirandaApenas seis meses después de que los operarios de Yárritu, empresa adjudicataria de la obra, comenzasen a trabajar en la zona, la carretera de San Miguel (BU-733) luce ya una nueva imagen, al menos en el tramo comprendido entre Bardauri y el límite provincial con La Rioja.A la espera de culminar la señalización horizontal -se espera realizar el pintado a lo largo de las próximas jornadas-, esta semana se han dado por concluidos los trabajos de asfaltado de este tramo, de algo más de cinco kilómetros de longitud. Para ello ha sido necesario limpiar previamente los márgenes de la antigua carretera -talando la mayor parte de los árboles que la custodiaban- y ensanchar la calzada.De hecho, el cambio más radical que ha sufrido la vía ha sido su considerable ensanchamiento, pasando de apenas 3´5 metros con los que contaba en algunos puntos a los 6 metros actuales repartidos en dos carriles de 3 metros cada uno. Asimismo se han incorporado sendos arcenes a ambos lados de la calzada, inexistentes hasta la fecha.También se han mejorado algunos puntos concretos del trazado, suavizando varias de las curvas más cerradas y algunos cambios de rasante presentes anteriormente.Otro de los aspectos más importantes de la actuación llevada a cabo ha sido la significativa mejora de los diferentes cruces que la atraviesan, como los del Club de Golf de Miranda o de la residencia para la tercera edad de San Miguel del Monte. La reforma de este punto concreto venía siendo demandada con asiduidad debido al peligro que entrañaba, no sólo para los usuarios de la vía, sino también para los propios residentes que habitualmente salen a pasear por el entorno.Ahora, una vez finalizada esta primera fase del proyecto -cuyo inicio tuvo que esperar casi medio año desde su adjudicación porque Yárritu aún trabajaba en la mejora de la carretera de Fuentecaliente- , la vía ha mejorado sensiblemente sus condiciones de circulación, equiparándose así con el tramo riojano que la prolonga hasta Tirgo, objetivo principal perseguido por la Junta de Castilla y León, administración competente en esta materia. En total, la ejecución del proyecto supondrá la inversión de casi 1´5 millones de euros.Segunda faseEso sí, aún queda mucho trabajo por hacer, sobre todo en el tramo comprendido entre Bardauri y el cruce con la carretera de Fuentecaliente en el entorno de la comisaría de la Policía Local. De momento, ya se han colocado buena parte de los bordillos que separarán la calzada de la acera perimetral que se levantará para unir el barrio con el resto de la ciudad, si bien, aún queda por ejecutar el grueso de los trabajos. Y no será sencillo.No en vano, este tramo -de apenas un kilómetro de longitud- presenta varias complicaciones técnicas, como las pronunciadas curvas más cercanas al cruce con la carretera de Fuentecaliente o el puente que actualmente salva la línea férrea Bilbao-Castejón. En este punto concreto, los operarios de Yárritu deberán afrontar una de las actuaciones más complicadas, como es el ensanchamiento del propio puente para poder encajar los dos nuevos carriles y la acera perimetral.También resta por acometer la mejora de la travesía a lo largo del propio barrio, que actualmente no está debidamente urbanizada y puede acarrear problemas de seguridad.Proyecto esperadoSea como fuere, los vecinos de Bardauri, que durante años han venido denunciando el lamentable estado en el que se encontraba la carretera, se mantienen expectantes ante el inicio de la ejecución de la segunda fase de la remodelación de la misma, que a la postre contempla el arreglo del tramo que más les afecta en su vida cotidiana.Eso sí, no será hasta dentro de algunos meses cuando puedan ver concluida la obra. De hecho, el proyecto fue adjudicado en su día con un plazo de ejecución de 12 meses desde el inicio de los trabajos.