Estudian que una mancomunidad gestione la Vía Verde en La Bureba

GERARDO GONZÁLEZ/ Brivesca

El impulso dado desde el Gobierno Central a la habilitación del tramo del antiguo ferrocarril Santander-Mediterráneo en el tramo desde Quintanilla Vivar a Castellanos de Bureba ha reactivado el proyecto. Así,uno de los aspectos a tener en cuenta una vez hayan finalizado las actuaciones estatales y del grupo de acción local de este tramo, en su proyecto global participan Adeco Bureba y Ceder Merindades, es la conservación,  mantenimiento y difusión de la misma. Por ello, se considera como la fórmula más idónea la creación de una mancomunidad de municipios, en total cruza por seis términos, que asuma estas tareas necesarias.

Tanto el coste de conservación como las acciones tendentes a su puesta en valor resultarían complejas y difíciles si cada uno de los pueblos las realizara por separado.  A ello se suma la imposibilidad de acceder a líneas de ayudas institucionales creadas para los distintos tipos de mancomunidades existentes.

Por ello, tras la remisión del informe redactado por los técnicos del Estado relativos a los problemas detectados en algunos puntos, así como las ocupaciones de partes de la traza, se prevé la convocatoria de una reunión de los ayuntamientos con el grupo de acción local. Según los datos de la Dirección General de Desarrollo Sostenible del Medio Rural, las actuaciones en la futura Vía Verde que se están desarrollando tras la firma del acta de replanteo, son el desbroce y reconocimiento del terreno.

Estas se realizan en el tramo de 44 kilómetros comprendido entre las localidades de Quintanilla Vivar y Castellanos de Bureba contando en total con un presupuesto de 2.720.630 euros y plazo de ejecución es de 36 meses. El proyecto total prevé efectuar una serie de excavaciones y desmontes en las intersecciones con otros caminos, hormigonar los cruces y estabilizar taludes y trincheras.

Está previsto nivelar y compactar la plataforma del camino, aprovechando el balastro original de la antigua vía férrea, formado por un material adecuado para servir como sub-base del trazado.  Sobre esta sub-base se construirá un firme granular de 15 centímetros de espesor con una capa de zahorra artificial.

Asimismo, a lo largo del recorrido se van a acondicionar dos puentes metálicos sobre el río Ubierna, un pontón sobre el río de La Molina, y otro puente sobre un afluente del río Homino.