BURGOS EN CAMINO
Torregalindo, el mayor Belén viviente de Burgos
La Navidad es también un buen momento para descubrir paisajes y, a la vez, conocer entrañables tradiciones que se guardan con esmero en la provincia
LORETO VELÁZQUEZ / Aranda
A punto de celebrar la Noche Buena, hoy les invitamos a seguir viviendo la magia de la Navidad hasta el próximo 6 de enero. Para ello, empezaremos la ruta en Aranda de Duero donde podremos contemplar la recién restaurada fachada de la Iglesia de Santa María o la de San Juan y su museo de Arte Sacro. El viaje continuará por la carretera CL- 603 donde encontraremos Campillo de Aranda, una localidad de apenas 196 habitantes, en el que merece la pena detenerse en la Iglesia de la Asunción de Nuestra Señora. Pero nuestro destino nos espera un poco más adelante, apenas a cinco kilómetros; en Torregalindo, un pueblo de 130 vecinos que cada Navidad representa el Belén viviente más grande de la provincia de Burgos gracias a la colaboración de los pueblos de alrededor.
Así, el 5 de enero, el municipio se transforma y retrocede en el tiempo para recrear la llegada de los Reyes Magos de Oriente. Cada rincón cuenta y conscientes de ello, los 200 participantes cuidan con mimo cada detalle, desde los dos mercados hasta la casa de Herodes, la posada y cómo no, el Belén.
La historia de esta curiosa tradición se remonta a hace treinta años cuando una veintena de vecinos animados por una joven profesora se embarcaron en una aventura que comenzó con escasos medios y que hoy atrae a más de 2.000 personas. «El año que más gente vino fueron 5.000 pero todo depende de cómo caiga la Navidad y sobre todo del tiempo», explica la organizadora, Marifé Cristóbal, quien destaca el esfuerzo realizado cada edición para que todo esté perfecto. «Solo el vestuario tiene un valor incalculable», apunta.
La jornada comienza el día 5 a las 18.30 horas. Todos bien colocados esperan la salida de la Virgen que llega al portal una hora y media después. Entonces parte la cabalgata de los Reyes Magos que desde el castillo va bajando recorriendo todos los puestos para terminar en el Belén con la adoración del Niño y la posterior y esperada entrega de regalos. Y es que, los Reyes recorrerán todas las casas donde haya niños del pueblo. «Es una tradición muy bonita y a los niños les encanta», subraya mientras recuerda que el año anterior contaron con tres reyes de excepción: el atleta Juan Carlos Higuero; el jugador del BM Villa de Aranda, Julio Rasero, y el jugador de La Arandina CF, Airton.
Los visitantes podrán adquirir además los dulces típicos, y probar las patatas asadas y los churros. En cualquier caso, la visita no puede terminar sin recorrer las ruinas del castillo medieval; una fortaleza que formaba parte de la línea defensiva del río Riaza; la iglesia románica San Juan Bautista, el molino de agua o la belleza de su ribera.
Torregalindo se encuentra en la carretera 603 a 12 kilómetros de Aranda de Duero y tiene una superficie de unos 12 kilómetros cuadrados.