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MOLESTIAS EN LA LOCALIDAD

Varios comercios de Lerma recogen firmas para pedir que se acabe con el mal olor

Entienden que el vertido de purines es necesario al ser zona agrícola, pero piden que se entierren y se viertan a más de 1.500 metros, tal y como marcan las normativas

Burgos

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M. A. DE LA CRUZ / Lerma

Varios comercios de Lerma han iniciado una recogida de firmas ante el malestar general por el mal olor que produce el vertido de purines en tierras de labor, y que se enviarán al jefe del Área de Salud de la Junta, al jefe de Servicio de Medio Ambiente de la Junta y al Ayuntamiento de Lerma. El fin es que se tomen medidas para minimizar las consecuencias de los vertidos ya que entienden que estos son necesarios, pues la proliferación de granjas de porcino en la zona contempla la inevitable eliminación de residuos orgánicos, los cuales además como abono, son beneficiosos para la agricultura.

Sin embargo, no es la primera vez que sucede. En agosto de 2008, El Correo de Burgos ya publicó el mismo malestar existente entre los lermeños. En el mes de septiembre de aquel año y tras una reunión del Ayuntamiento con granjero se publicaba en el boletín oficial de la provincia una nueva Ordenanza Reguladora de la Gestión de Residuos Ganaderos para Lerma.

Consistorio, más exigente

En su preámbulo, el Consistorio ya enunciaba que «la comarca del Arlanza tiene su futuro económico fundamentado en la industria y el turismo, sobre todo cultural», por lo que se destacaba el deseo de proteger el medio ambiente y la salubridad pública, debiéndose poner «los medios necesarios para que la gestión de residuos ganaderos no ponga obstáculos a los principales sectores de desarrollo económico de Lerma. En la ordenanza se contemplaba así la prohibición de verter residuos a menos de 1.500 metros del suelo urbano o urbanizable o de instalaciones vinculadas con el turismo u otras similares a las que pudieran perjudicar los malos olores generados. Así mismo contempla el enterramiento de purines en un plazo máximo de 24 horas.

Contradicción

Sin embargo, en una resolución de 1 de agosto de 2012, de la Delegación Territorial del Servicio de Medio Ambiente de Burgos, se concedió autorización para ampliación de explotación porcina ubicada en terreno municipal de Lerma, en la que se especifica la prohibición de realizar vertidos a menos de 200 m. de núcleos de población, pozos, manantiales de abastecimiento de agua.

Contradicción que hace pensar en una posible mala sintonía del Ayuntamiento de Lerma con el ente autonómico, ya que la ordenanza reguladora del Consistorio marca mayor exigencia a 1.500 metros mientras Medio Ambiente requiere apenas 200 metros.