Los agricultores cosechan mientras los precios de venta siguen en el aire

M. M. / Burgos

El presidente regional de la agrupación agraria Asaja, Donaciano Dujo, afirmó ayer que si bien los precios del cereal están un 30% más bajos de lo que lo estaban el pasado año, »los agricultores estamos ahora preocupados en terminar de recoger la cosecha, siendo finales de septiembre y octubre cuando podamos empezar a vender, ya que se nos quiere comprar a unos precios a los que nosotros no queremos vender», afirmó.

Como ejemplo, informó que por el trigo, «que el pasado año se vendía a 245 euros por tonelada, se ofrece ahora 170, así como en la cebada, que de 232 euros por tonelada la quieren comprar a 160».

Éste recordó que la bajada de precios está llevando a muchos a plantearse la posibilidad de almacenar el cereal en lugar de acudir a la venta directamente, «ya que los precios están tocando fondo, y con ello los agricultores, pero es algo que comenzaremos a plantear en septiembre, ya que creemos que todo se debe a una actuación especulativa que no aceptamos».  

El representante regional de Asaja se lamentó ayer en Burgos, de que en las últimas negociaciones llevadas a cabo en Europa con el fin de reformar la PAC, no se hayan incluido mecanismos que impidan que los precios bajen tanto, haciendo insostenible la situación.

Explica que en su opinión deberían existir fórmulas en Europa de intervención, «de forma que cuando baje la producción en cualquier sector -no sólo cereal sino cualquier producto que se produzca en Europa-, se dé la voz de alarma y se intervenga en el mercado de esos productos», defiende.

Añade que el fin logrado sería así doble, ya que se evitaría que bajen los precios en demasía y por otro, cuando por escasez éstos subieran demasiado, se podría sacar al mercado parte del producto almacenado para que el sistema siga equilibrado», propuso. «Sin embargo se ha vuelto a perder la oportunidad», se lamentó, «dejándonos en manos de los intermediarios.

Dujo se resigna y explica que al agricultor no le cabe la posibilidad de negociar y vender de forma personal el fruto de su cosecha, algo que sí es posible a través de las cooperativas, con la posibilidad de almacenar el cereal y venderlo escalonadamente durante todo el año.

«Pero tal y como está el sistema actual, es imposible que en éste no entren los intermediarios, al ser éstos los que compran», por lo que insiste en pedir a las Administraciones que actúen de mediadores.

En cuanto a la cosecha lograda este año, explica que en Burgos, aún se sigue trabajando ya que la lluviosa primavera ha retrasado la cosecha unos 15 días, siendo más de 1,6 millones la lograda.

Explicó que los resultados de ésta han sido buenos, manteniendo el peso de la región en la producción de cereales, ya que este año aportará 7 de las 16 toneladas de todo el país.