El Ermitaño cobra protagonismo en las actividades de la Cofradía

E. MALDONADO / Miranda

El próximo domingo, el paraje de San Juan del Monte volverá a acoger a cientos de mirandeses que conmemorarán, como cada primer domingo de septiembre, el día del Ermitaño. Se trata de un acto, sin duda,  menos ruidoso que el de la romería de San Juan del Monte, pero no por ello menos entrañable.

Meses después de la ‘fiesta grande’ en honor al santo, la Cofradía de San Juan del Monte vuelve a organizar una cita a la que este año quiere darse mayor relevancia, manteniendo la tradición, pero añadiendo actos, entre los que se encuentra una comida popular para mil comensales.

De este modo, el domingo se mantendrá la celebración de la misa de campaña junto a la escultura del ermitaño, el reparto de bollos preñaos y pañuelos conmemorativos. También continuará ofreciéndose el tradicional concierto de la Banda Municipal de Música, pero se añaden nuevas propuestas para prolongar la jornada festiva.

Y es que, según confirma el presidente de la entidad, Álvaro de Gracia «nosotros habíamos advertido que la asistencia había bajado en los últimos años y que a las tres de la tarde la gente desaparecía, lo que nos parecía un contrasentido», afirmaba. «Queremos potenciar la asistencia y también que la gente se quedara a pasar todo el día».

Para ello, esta nueva junta directiva propone apostar por los más pequeños. «Consideramos fundamental que los niños participen de los actos festivos. Por eso subiremos hinchables al monte y a partir de las doce van a poder estar allí en perfectas condiciones de seguridad», indicó De Gracia.

Además, la Cofradía recupera el protagonismo de las charangas, con la actuación de Los Goofys y Los Chipirones, las dos formaciones locales, que «por la mañana estarán tocando en el monte», explica, y a partir de las 16,30 horas realizarán una exhibición. Pero sin duda, la novedad la aporta la comida solidaria «para mil personas, gratuita y muy sencillita, pero que esperemos que cuente con mucha participación», pidió el presidente.

La Cofradía ubicará en La Laguna unas mesas para facilitar la retirada de tickets, junto a los que ubicará unas huchas «donde la gente podrá realizar el donativo que estime oportuno», y que irá a beneficio de Cáritas. Esta junta directiva se ha caracterizado desde su elección por el apoyo a los colectivos desfavorecidos , «y hemos creído que este era un buen momento para ayudar Cáritas». De esta forma, quienes realicen el donativo recibirán como obsequio un llavero con el escudo de la Cofradía.

Novedades

Sin embargo, para Álvaro de Gracia, el día del Ermitaño aún puede mejorar. «Me gustaría que tuviera otro formato», señala indicando su intención de involucrar a las cuadrillas en esta comida popular. La idea sería «que las que están en La Laguna cediera sus instalaciones y poder comer todo el mundo sentados», comenta. De momento, este año funcionará como «fase experimental y en función de cómo se desarrolle, para ediciones posteriores hablaremos con las cuadrillas para poder organizarlo de otro modo», detalla el presidente.

Y es que, según sus propias palabras, la Cofradía está experimentando una «profunda transformación». Este año, el cambio se ha basado «en lo que se refiere a la gestión y las relaciones con las cuadrillas», pero la intención para la próxima edición es «un planteamiento distinto en el diseño del programa, multiplicando las actividades de calle y de participación, también en el día del ermitaño», concluye.

Orígenes de la fiesta

Desde hace 30 años -esta será la XXXI edición- se celebra el día de homenaje a Juan el Ermitaño. La tradición de conmemorar esta efemérides comenzó el domingo 5 de septiembre de 1982 con motivo de la bendición e inauguración del monumento a Juan el Ermitaño; una imponente figura, obra del artista local Alejandro Almarcha y que en esa fecha, fue llevado al paraje del monte donde reside desde entonces.

Según recoge la hemeroteca de la Cofradía sanjuanera, para aquella ocasión se desplazaron a Miranda las bandas de música de Medina de Pomar, Briviesca, Poza de la Sal y Pradoluengo, acompañadas por la de Miranda y la «banda de cartón» La Compresa.

La inauguración del monumento contó con la presencia de autoridades autonómicas, provinciales y locales, que participaron en la misa de campaña oficiada por el vicario general de la Archidiócesis y el párroco de Santa María.

Al término de la misa y bendición de la escultura, el alcalde de la ciudad, José Luis Anuncibay, retiró la cortinilla que cubría la placa de piedra con la inscripción: ‘Homenaje de la Cofradía de San Juan del Monte a Juan el Ermitaño’.

Obras de mejora

Con la llegada del otoño, se retomarán los trabajos en el paraje de La Laguna. En esta ocasión, las obras serán para realizar reformas y mejoras en el entorno de la fuente, tanto en lo referido a la zona de acceso, «donde se colocarán parte de las barandillas del puente de Carlos III», como en la mejora y restauración de los desagües «porque están causando algunos problemas a las cuadrillas de la zona», como El Humo o Los Silenciosos.

Y es que, durante la celebración de las fiestas y por el uso continuado de la instalación, se producen problemas de humedades que se solucionarán con estos trabajos de mantenimiento.