El río Nela vuelve a salirse y el Ebro salva otra catástrofe

Una vez más, la tercera en lo que llevamos de mes, el delegado territorial de la Junta de Castilla y León en Burgos, Baudilio Fernández-Mardomingo, volvió a activar el Plan de Protección Civil ante Riesgo por Inundaciones (Inuncyl) debido a unas previsiones que volvieron a causar desperfectos .El río Nela volvió a desbordarse a su paso por Villarcayo durante la madrugada alcanzando una altura de 3,60 metros -el nivel medio es de un metro- y un caudal próximo a los 160m3 por segundo al mediodía. Tampoco Trespaderne se libró de su subida -4,69 metros y 492m3 por segundo-, que al cierre de esta edición se mantenía al alza.Aunque el pico registrado en el Nela por Villarcayo comenzó a descender a partir de las 13 horas, lo cierto es que la mañana resultó complicada e intensa para los voluntarios de Protección Civil, quienes atendieron numerosos avisos para ‘rescatar’ coches inmersos en balsas de agua y organizar los salida de los alumnos del colegio Princesa de España cuando se decidió suspender las clases debido a un fallo en el suministro eléctrico y las posibles inundaciones en las zonas aledañas.Por su parte, el instituto Merindad de Castilla no pudo abrir sus puertas, ya que los accesos se encontraban completamente inundados desde primera hora de la mañana.Recado a la cheLa alcaldesa de Villarcayo, Mercedes Alzola, lamentaba que la cuantía total de los desperfectos municipales supondrá «mucho dinero», ya que «todos» los edificios de titularidad pública se han visto afectados por las lluvias durante este mes.Por otra parte, Alzola criticó con dureza la actuación de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) durante las inundaciones, puesto que «ni limpian ni dejan limpiar», refiriéndose de esta manera a la gran cantidad de maleza y otros residuos que atoran los márgenes del río.El ebro en prevenciónEl Ebro experimentó una nueva crecida a su paso por Miranda. Concretamente, más de 5 metros de altura y un caudal de 700 metros cúbicos por segundo durante la tarde noche del jueves. La subida de temperaturas de los últimos días y las precipitaciones hicieron que el caudal del río volviera a mantener ayer en alerta a la localidad, dentro de lo que la Confederación Hidrográfica del Ebro calificó como «caudales de avenida extraordinaria». Éstos acabaron superando los niveles de la crecida del pasado día 16 de febrero, pero fueron sustancialmente inferiores a la del 31 de enero. En este sentido, el alcalde, Fernando Campo, declaró que en esta ocasión «se han tomado diferentes medidas que han ayudado a que esté mucho más controlado que el día 16 y el día 31». De esta forma, Campo se refirió a las maniobras de los últimos días en los embalses de la cuenca que han conllevaron «desembalses preventivos» para reducir el impacto de esta nueva avenida. Así, el embalse del Ebro en Reinosa (Cantabria) cortó en el día de ayer sus aportaciones después de realizar sueltas preventivas durante los días previos, mientras que en el embalse de Sobrón se realizó una maniobra con la intención de reducir los caudales circulantes aguas abajo en hasta 50 m³ por segundo. Para el alcalde, «esta vez se está haciendo lo que no se hizo las otras veces, controlar más Ullíbarri y Sobrón», por lo que cree que «lamentablemente, la experiencia ha servido para que trabajen mejor».Las mayores afectaciones se produjeron en la urbanización de El Lago, donde el agua del Zadorra llegó hasta la zona de juegos y campo de fútbol existente en la zona, así como a algunos garajes. En el casco urbano, el Ayuntamiento cortó el acceso en varas zonas como La Arboleda, camino Los Pinos o las calles Álava, Bilbao y un tramo de calle Arenal con San Nicolás, avisando a los vecinos de las zonas más cercanas al río en previsión de que el agua pudiera entrar en sus garajes o portales.Así mismo, Campo dio orden en el polideportivo municipal para «desmontar las bombas que habíamos montado en los últimos días, para que no vuelvan a estropearse», en referencia a los desperfectos ocasionados durante el último mes con motivo de las anteriores crecidas.Cortes en carreterasComo era de esperar dados los avisos, diversas vías del norte de la provincia registraron alguna que otra incidencia. De nuevo, el puerto de Lunada sufrió cortes al tráfico y la obligatoriedad, junto a Las Machorras, de usar cadenas en algunos tramos debido a la nieve. Además, la Junta instó a la precaución al volante en casi una treintena de vías de la red secundaria.