El Arlanza pone en jaque a la Sierra de la Demanda
El agua llega a las calles del centro de Salas de los Infantes, viviendas de Palacios de la Sierra y provoca cortes de carretera en la comarca
Aunque se esperaban precipitaciones, la zona alta del Río Arlanza vivió ayer una jornada aciaga por las inundaciones que provocaron cortes de carreteras y anegaron calles, naves y prados de localidades como Salas de los Infantes, Palacios de la Sierra, Hontoria o Vilviestre del Pinar. En apenas 24 horas, la comarca registró en torno a 90 litros por metro cuadrado, que unidos a los ya caídos en los últimos días provocaron una de las peores inundaciones que se recuerdan en los últimos 50 años.Con seis estaciones de control en alerta y con el foco en los ríos Arlanza, Arlanzón y Pedroso en el caso de la provincia, la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) señaló que el aumento de los caudales podrían continuar durante los próximos días.Sin lugar a dudas, Salas fue el municipio más perjudicado por la crecida del Arlanza, que llegó a alcanzar 252,67 metros cúbicos por segundo cuando su referencia de alarma se sitúa en 124. Calles céntricas como Cardenal Benlloch, Las Huertas, Filomena Huerta y San Roque se anegaron por completo por los desbordamientos del río. La situación afectó de lleno a diversos comercios y casas. Incluso fue necesaria la intervención de los bomberos, quienes tuvieron que ayudar a tres personas a salir de su domicilio. No fue la única intervención de estas características, ya que fuentes del 112 confirmaron a este periódico que su sala de operaciones recibió numerosos avisos durante todo el día.Por su parte, la Guardia Civil asistió a una profesora del Colegio Público salense atrapada en su vehículo ante la crecida del río Ciruelos a las afueras del municipio. La rápida intervención de los agentes, en colaboración con un camionero, impidió que el turismo fuese arrastrado por las aguas. Asimismo, la Benemérita, Cruz Roja y los Bomberos hicieron llegar la cena al centro de Aspanias mientras ayudaban a sus trabajadores a salir.«La situación es horrible». Con estas palabras calificaba la alcaldesa de Salas, Marta Arroyo, la gravísima situación en la que se encontraba el pueblo pasadas las 18 horas cuando comenzó a subir al máximo el nivel del río. «Está todo inundado y hay muchos vecinos afectados, sobre todo comercios donde están achicando el agua como pueden», detallada con evidente preocupación.«Aunque la gente está con mucha precaución, tenemos miedo porque la cosa puede agravarse mañana -por hoy- con más lluvias», explicó. No obstante, confía en que cuando el pantano esté en pleno funcionamiento para que esta situación no vuelva a repetirse, ya que «mientras tanto no podemos hacer nada contra la meteorología».La estampa no fue mejor en otros pueblos de la comarca como Palacios de la Sierra o Vilviestre del Pinar. Y es que desde primera hora de la mañana los vecinos fueron testigos de cómo crecía el nivel del río. En Vilviestre, la carretera BU-V-8225 situada en la entrada a la localidad fue cortada al tráfico en ambos sentidos poco antes del mediodía por motivos de seguridad al encontrarse completamente anegada, aunque se abrió nuevamente por la tarde. Sin embargo, gran cantidad de prados de la zona continúan hoy afectados por la riada.De igual manera, la situación de alarma se mantiene a lo largo de hoy en Palacios de la Sierra, que vivió una larga y difícil jornada a causa de las graves inundaciones en fincas, almacenes y algunas viviendas próximas a la zona de la Dehesilla, cuyos bajos acabaron inundados. A la espera de cómo se desarrollan los acontecimientos, la alcaldesa de la localidad, Estíbaliz Llorente, indicaba que «Estaremos alerta y esperamos que no vaya a más la crecida».En la N-234 a su paso por Hontoria del Pinar, el agua inundó uno de los carriles, mientras que el acceso al Parque Natural del río Lobos se cerró por completo al tráfico hasta nuevo aviso. «Teniendo en cuenta que la situación de lluvias continúa y que la previsión meteorológica es que se mantengan las precipitaciones en las próximas horas, la dirección del parque prevé, a la vista de los informes de los agentes medioambientales y a la espera de la evolución del caudal, que la entrada pueda permanecer cerrada varios días», señalaban desde la Junta de Castilla y León. En condiciones de conducción irregular se encontraba la misma vía en Rabanera del Pinar, donde se cortó uno de los carriles.Otra vía provincial que permaneció cortada al tráfico desde las 12 horas por pavimento deslizante fue la BU-V-8205, en ambos sentidos, a la altura de Vizcaínos. Por su parte, la CL-117 en Canicosa y la A-231 entre Osorno (Palencia) y Villalbilla, ambas con circulación condicionada por meteorología adversa y viento racheado, respectivamente.Al límite o bastante cerca de rebasar su caudal se encontraba -al cierre de esta edición- el Arlanza a en Lerma, Quintana del Puente y Peral de Arlanza. Donde sí se rebasó la referencia de alarma de la CHDfue en la salida del embalse del río Arlanzón, que alcanzó un caudal de 32,45 metros cúbicos por segundo cuanto su máximo está en 26. También sobrepasó su nivel, aunque por poco, el río Pedroso en Pinilla de los Moros.El PSOE perjudicadoLas fuertes precipitaciones también afectaron al secretario general del PSOE en Castilla yLeón, Luis Tudanca, quien tuvo que suspender su visita a Salas para reunirse con representantes de Aspanias y militantes de la comarca en compañía de los cabezas de lista por Burgos en el Congreso y en el Senado, Esther Peña y Ander Gil.