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Miranda lidera el rechazo de la provincia a reabrir Garoña

Unidos Podemos registra en Industria las mociones de los municipios que abogan por su cierre / Vila confía en dar marcha atrás a la licencia del almacén de residuos

Marco Antonio Manjón (segundo por la izquierda), se desplazó ayer a Madrid para defender el cierre de Garoña.-ICAL

Burgos

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Unidos Podemos registró ayer una moción en el Ministerio de Industria contra la reapertura de la central nuclear de Santa María de Garoña en la que se incluyen todas las mociones presentadas por ayuntamientos próximos a su entorno. Entre ellos se encuentran Miranda de Ebro, Valle de Sedano y Valle de Zamanzas, que no han dudado en sumarse al «consenso social y civil» para el impulso de un «plan de reindustrialización», según confirmó a este periódico el diputado en funciones de Podemos por Burgos, Miguel Vila.Consciente del apoyo en bloque de la oposición al cierre definitivo de la central, el diputado criticó el «absoluto desprecio» del PP hacia «el resto de las fuerzas políticas» con representación parlamentaria. Asimismo, señaló que un Gobierno en funciones carece de legitimidad para promover un «proceso de reapertura», máxime cuando un vuelco en las urnas condicionaría económicamente al futuro Ejecutivo ante la más que previsible denuncia «por lucro cesante» de Nuclenor que afectaría al «bolsillo de los españoles»Hasta Madrid se desplazó para apoyar la moción el diputado provincial de Imagina Marco Antonio Manjón, que en declaraciones a Ical manifestó que incluso «un ayuntamiento como es el del Valle de Sedano, que está gobernado por el Partido Popular, ha apoyado el cierre de Garoña de forma definitiva».Por su parte, el portavoz de la empresa adjudicataria de la central, Elías Fernández, aseguró que «cada uno es libre de hacer lo que quiera», por lo que Nuclenor no hará «ninguna lectura» al respecto.Almacén de residuos

En cuanto a la reciente concesión de la licencia de obras por parte del Ayuntamiento de Valle de Tobalina para la instalación de un almacén temporal de residuos con capacidad para 32 contenedores, Vila explicó que un «cambio de Gobierno» permitiría impulsar un estudio para revertir la autorización.Por lo tanto, y a pesar de las dificultades que entrañaría dar marcha atrás, afirmó que «sí sería posible». Además, teniendo en cuenta el actual escenario político, remarcó que este permiso «no se debería haber concedido».