RIBERA
Un borrador de Presupuestos con poco margen de negociación
Las sentencias judiciales reducen el montante de inversiones en apenas 600.000 euros
Lo avisa nada más empezar la presentación: «no es un corta y pega» de la propuesta de 2016 que quedó sobre la mesa, «es un presupuesto real y ajustado a la actual situación económica de Aranda». Una situación marcada un año más por el pago de sentencias judiciales. «Nos están penalizando mucho», advierte el nuevo concejal de Hacienda, Emilio Berzosa.Y es que, a pocos meses de cerrar un año complicado en el que el Ayuntamiento va a abonar a la constructora del caso Proincove un total de 2.948.000 euros (un millón que se pagó en abril, 900.000 en los últimos remanentes y el recién acordado millón por la venta de la parcela de la calle Premios Envero a Michelin), todavía queda mucho por pagar y por cumplir. En concreto, 373.639 euros al cuarto y último plazo de Proincove; 369.181 euros al cuarto plazo del Sepes, y 337.184 como tercer plazo en el justiprecio de San Antón.La parte positiva, explica el edil, es que al realizar este esfuerzo quedaría concluido el pago a Proincove, y se evita pagar los 240 «sangrantes» euros que cada día se contabilizan como intereses. «Quedaría por pagar los 2.460.000 euros de intereses, que ya veremos cómo se van afrontando», subraya consciente de que a la hora de cuadrar han resultado determinantes la venta de la parcela municipal a Michelin, y los ingresos del Estado y del Fondo de Cooperación Local de Castilla y León (que suman 800.000 euros). «Permitirá cancelar la mayor parte del capital principal antes del 31 de diciembre», afirma Berzosa.Bajo esta delicada perspectiva, las inversiones se verán nuevamente reducidas en los Presupuestos de 2017. De 1.639.577 euros de inversiones, solo 600.000 están de verdad disponibles. Y de esa parte, en alguna ni siquiera hay capacidad de negociación como en los 172.053 euros planteados por el equipo de gobierno para el albergue juvenil Las Francesas, al estar vinculado a un taller de empleo. El resto se completa con 306.519 euros para aceras en diferentes barrios, 110.000 para la reposición de ordenadores y conexión con la red central de la Casa de Cultura, la Casa de los Fantasmas y la Casa de la Juventud; y 71.000 para la reparación del acueducto frente a la antigua azucarera, cuyo estado hace peligrar el abastecimiento de agua en la zona norte de Aranda.Dicho esto, el concejal garantiza que al igual que en 2016, el 100% de los remanentes de febrero irán a inversiones para Aranda, incluido un plan de empleo «algo más amplio que el de este año». «Calculo que los remanentes rondarán entre 1.200.000 y 1.400.000 euros», adelantaba, con la esperanza de que esta vez Aranda sí pueda contar con unos Presupuestos. «Es importante que tengamos unos Presupuestos actualizados por los niveles de endeudamiento, y por tener estabilidad», defiende.Sobre un total de 29,2 millones de euros, hay diferencias con las cuentas presentadas en 2016. Disminuyen las previsiones, al no contar con la fallida enajenación del matadero municipal. En los ingresos llama la atención el incremento derivado de la gestión de multas que pasa de 250.000 a 380.000 euros. Además, el borrador despeja una de las dudas de la semana: la cuantía que el equipo de gobierno prevé destinar a las ayudas para las inspecciones a edificios mayores de 40 años: 81.000 euros. «Vamos a ver cómo se puede hacer para que esas subvenciones lleguen a quien lo necesita, no a la comunidad sino al vecino en cuestión», asegura Berzosa.Con el fin de evitar que la Ley de Estabilidad Presupuestaria impida el año que viene solicitar un préstamo por el poco nivel de endeudamiento de un consistorio que no supera el 5%, este año el Ayuntamiento recurrirá a esta vía, algo que no se hacía desde hace dos legislaturas.