RIBERA
La Junta cierra la gestión del Ctacyl con San Gabriel
El centro formativo confía en que la apertura del edificio se lleve a cabo en diciembre
Aunque el encuentro a cuatro bandas que convocó ayer la alcaldesa, Raquel González, entre la Consejería de Agricultura y Ganadería, el centro formativo San Gabriel -como gestor del edificio-, y las asociaciones Asemar y Asebor -como posibles colaboradoras- pretendía reabrir el proyecto del Centro Tecnológico Agrario (Ctacyl) a todos, lo cierto es que las posturas siguen intactas.Por un lado, la consejera, Milagros Marcos, reiteró que la cesión del uso del edificio tendrá un único destinatario, la Ciudad de la Educación San Gabriel. «Por diferentes avatares, el edificio ha estado cerrado más tiempo del que hubiésemos deseado», apuntó en clara alusión a los casi dos años de negociaciones que la Administración mantuvo, sin éxito, con la asociación empresarial Asemar.Por otro lado, la patronal arandina sigue escéptica ante el desarrollo de un proyecto que esperaba que dependiese del Ayuntamiento y en el que ya no se sienten implicada. En este sentido, cabe recordar que tras descartar el centro tecnológico por la llegada de la crisis, la propuesta de Asemar pasaba por dar forma a un vivero de empresas que se completase con su sede y las de Jearco y Asebor. Sin embargo, la negativa del Gobierno regional de sufragar el equipamiento supuso la ruptura de la negociación.Sí a las Empresas
Con Asemar en la gestión no, pero sí con las empresas del sector. Esa fue la segunda conclusión de una comparecencia en la que la consejera tendió la mano a todas las «entidades que quieran impulsar el sector agroalimentario». «Como primera actividad habrá una reunión con todos los empresarios del sector para explicarles el proyecto y las líneas de ayudas que la Junta de Castilla y León tiene habilitadas para impulsar la industria agroalimentaria». Y aquí, señaló, tanto Asebor como Asemar podrán «disponer de este estupendo centro».Con la esperanza de que se superen las discrepancias, la Consejería prepara una cesión que se prolongará durante cuatro años, con posibilidad de prorrogar otros cuatro. Se trata de una cesión del uso, que no de la propiedad. Y aunque entrados en materia tendrán cabida varias actividades, el pilar principal será la formación agroalimentaria y agraria. «Habrá formación nueva con módulos novedosos en Formación Profesional y también Formación No Reglada y online, algo muy importante para el sector», subrayó Marcos a sabiendas de que el espacio tendrá un vivero de empresas y dará un impulso a las figuras de calidad amparadas por Tierra de Sabor.La cesión del uso del edificio se formalizará en las próximas semanas cuando la Administración finalice las obras de adaptación que ha valorado en 60.000 euros. Entre las tareas pendientes, destaca la instalación de la caldera y la reposición de unos cristales que, por sus características, ha sido complicado encontrar.A la espera de formalizar el ‘traspaso’, San Gabriel ya tiene claro cómo se llamará el edificio. Eliminará la palabra ‘Tecnológico’ porque no se ajusta a las exigencias del Ministerio de Industria, pero mantendrá la esencia original como ‘Centro Agroalimentario Tomás Pascual’. «Es el mejor homenaje a la figura de Tomás Pascual», afirmó el director de San Gabriel Aranda, Enrique García Agüera.Partiendo de que el mobiliario saldrá del centro de La Aguilera, la inversión inicial que San Gabriel llevará a cabo asciende a 6.000 euros. «No podemos hacer grandes inversiones, pero para tres aulas y un salón de actos hacen falta mesas, sillas y pizarras y capital humano, que lo tenemos», aseguró.Los planes de San Gabriel
La solicitud de acortar la cesión a cuatro años parte de San Gabriel, que fiel a su filosofía de no emprender proyectos en edificios ajenos a la congregación se toma este reto como una «labor social». «Nosotros nos comprometemos a dar contenido a este edificio y meter velocidad pero la idea es que pasados los primeros cuatro años, alguien se atreva a llevarlo. Si no aparece seguiremos con la misma ilusión», garantizaba García Agüera con la esperanza de que la apertura pueda producirse en el mes de diciembre. «Al principio funcionará unas horas y luego tendrá horario de mañana y tarde», subrayó.El proyecto gabrielista apuesta por la creación de un laboratorio analítico que cuente con el apoyo de universidades, empresas y organismos. En el apartado formativo incluirá. como propuestas iniciales, el traslado de La Aguilera de los estudios de panadería y repostería y la dotación de espacio a la parte presencial de los ciclos formativos de Grado Medio de Aceites y Vinos y Superior en Vitivinicultura y al Grado universitario en Enología. Además el proyecto se completará con un museo dedicado a ensalzar la imagen de Tierra de Sabor.Con el fin de velar por el buen funcionamiento, la Junta de Castilla y León ha creado una comisión de seguimiento que estará formada por San Gabriel y por el delegado territorial, Baudilio Fernández Mardomingo. El Ayuntamiento de Aranda de Duero queda fuera de toda competencia y no tendrá más obligación que recepcionar el edificio.