Aranda descarta una acogida de temporeros en el ferial
Cruz Roja y CCOO insisten al Ayuntamiento para que ceda algún local como albergue
El Ayuntamiento de Aranda de Duero descarta retomar el programa de acogida de temporeros. Una iniciativa asistencial y laboral que estuvo en vigor desde 2010 hasta 2015 y que el Consistorio dejó de lado ante el rechazo de una oposición política que consideraba este proyecto como una caridad «mal entendida» que solo agravaba el problema social. Pero lo cierto es que sin una legislación que regule el hospedaje de estos trabajadores temporales, la cercanía de la vendimia, con la llegada de trabajadores de otros países, preocupa ante un posible brote de Covid-19.Y es que, tras relacionar el Ministerio de Sanidad la mayoría de los 201 brotes con el ocio y los temporeros, la inquietud en la Ribera del Duero es palpable. Aunque todos coinciden en que la vendimia este año no solo supone un reto social por subsanar sino también un reto sanitario ante al que hay que tomar medidas, a día de hoy no hay un plan consensuado. Ni siquiera una mesa de trabajo con las partes implicadas. En la Junta de Castilla y León aseguran que se está organizando un plan desde Sanidad y Agricultura pero todavía se desconocen los pormenores. Desde el Ayuntamiento de Aranda, por su parte, aguardan instrucciones, convencidos de que esta administración local «no tiene capacidad» de realizar el seguimiento. «Nos han pedido información sobre cómo suele ser la vendimia aquí y en cuanto nos digan algo actuaremos», afirma el coordinador del CEAS-Aranda, Elías Tristán.En Cruz Roja no saben nada. «Aquí por ahora no ha llegado ninguna información», afirma el presidente, José Agustín Escudero, convencido de que en un año tan excepcional como este sería bueno que el Ayuntamiento de Aranda de Duero recuperase la función coordinadora, como hizo durante años en el recinto ferial con el programa de acogida de temporeros. «Este año en el recinto no se puede porque está reservado ante la posibilidad de que haya un rebrote pero a lo mejor se podría utilizar un polideportivo», propone.En la Unión Regional de Cooperativas Agrarias de Castilla y León (Urcacyl) tampoco hay información al respecto. «Sabemos que se está intentando trabajar con cuadrillas más locales pero me temo que será difícil. La verdad es que todavía no sabemos nada», admite el gerente, Jerónimo Lozano, mientras pone como ejemplo a los esquiladores, que «se concentran en algunos hoteles».En su opinión, el principal problema se encuentra en los temporeros que van de explotación en explotación haciendo pequeñas parcelas y no tanto, en los que están contratados para recolectar la cosecha en una sola bodega. DudasAunque algunas asociaciones sociales apuntan a que sería necesario retomar la iniciativa abandonada hace años por la que el Ayuntamiento de Aranda reservaba un espacio municipal para facilitar el hospedaje y la alimentación de los temporeros, desde CCOO expresan sus dudas. «No creo que sea la mejor solución porque congregar a muchas personas en un mismo recinto puede ser contraproducente si aparece el virus. Se extendería rápido», advierte el secretario general de CCOO Industria de Burgos, Juan Ruiz.Desde el sindicato lo tienen claro: la solución pasa porque los bodegueros y agricultores, junto a las administraciones, posibiliten alojamientos «dignos» como albergues o plazas en hostales. «Lo primero es reconocer el problema y la magnitud», apremia con la mirada puesta también en el Consejo Regulador Ribera del Duero. «Nos tenemos que poner a trabajar juntos cuanto antes», urge Ruiz, preocupado porque ante un agosto que suele ser inhábil, «nos plantamos en septiembre con la vendimia a las puertas».En esa mesa de trabajo que CCOO propone crear estarían convocados todos los actores «con responsabilidad» como ayuntamientos afectados, bodegueros, agricultores, sindicatos, Subdelegación de Gobierno y Junta de Castilla y León; los mismos que congregó hace tres años para firmar un acuerdo de buenas intenciones que por ahora no ha visto la luz.Desde CCOO Industria no esconden su preocupación ante la aparición de rebrotes en la próxima vendimia. «Sin querer compararnos con nadie, las situaciones que se están viviendo con respecto al trabajo temporero en diversas zonas de nuestro país, respecto de los brotes de COVID19 y las lamentables condiciones y situaciones que los trabajadores temporeros están viviendo, debemos intentar anticiparnos a los problemas que puedan surgir y planificar una vendimia con seguridad y con derechos», urgen convencidos de que «realizar afirmaciones de que la vendimia en nuestra provincia es totalmente segura, que los trabajadores no tienen problemas de transporte, de alojamiento, de atención a los menores y de incumplimiento de normas preventivas y del convenio, mientras se encuentran trabajando en nuestras comarcas es negar la realidad». CCOO recupera el informe que elaboró en la última campaña de Ribera cuando en 2019 se advertía de las situaciones de vulnerabilidad que habían vivido algunos temporeros procedentes sobre todo de países del este de Europa.En el mismo recogían fotografías de naves agrícolas donde se alojaban temporeros y donde permanecían niños de corta edad esperando el regreso del trabajo de sus progenitores. También se vieron, relatan, las furgonetas donde otros temporeros «malvivían» en las inmediaciones de algunas de las fincas en las que estaban trabajando.«Lamentablemente y reconociendo y dejando claro que se producen de forma minoritaria, siguen existiendo incumplimientos en las normas mínimas del convenio, en los desplazamientos, en la seguridad laboral en el trabajo y en el acceso a un alojamiento digno», insisten. Por ello, el sindicato retoma su llamamiento a los agricultores para que velen por estos trabajadores y no se dejen confundir por empresas multiservicio “creadas en ocasiones y únicamente para estas temporadas agrícolas», con un «ahorro de costes» que «puede salir demasiado caro».«Se deben realizar los esfuerzos necesarios para asegurar estancias dignas, no se puede seguir permitiendo que las naves agrícolas, las furgonetas, la masificación de personas en casas o viviendas, sean la solución al alojamiento», defienden decididos a seguir trabajando para erradicar estas situaciones.«Por nuestra parte estaremos, como en anteriores ocasiones, en la entrega de información a los temporeros, en prestarles nuestra modesta ayuda y en la vigilancia y denuncia de situaciones que puedan suponer un abuso o incumplimiento de la ley».