Villegas suma su vivienda a las 26 de 'Rehabitare' en la provincia

Villegas es hasta ahora el último de los pueblos burgaleses en sumarse al programa regional ‘Rehabitare’  con el que la Junta ayuda a los pequeños municipios a recuperar viejos o ruinosos edificios, como viviendas que poder ceder posteriormente a personas y familias necesitadas a cambio del pago de un alquiler social.En este caso el edificio elegido fue en 2019 la casa de la maestra, el cual ya en desuso desde hace tiempo, ayer lucía convertida en un coqueto edificio en pleno centro de la localidad, de dos alturas y con dos viviendas en su interior en la que se ultiman los arreglos. «Proyecto en Villegas al que este mismo año se sumarán otros 6 en la provincia de Burgos, y otras que impulsen las diputaciones tras haberse firmado recientemente un protocolo con las 9 instituciones provinciales, con el que ellas aportarán entre 200.000 y 300.000 euros igualando la Junta dicha cifra», detallaba la directora general de Vivienda, Arquitectura y Urbanismo, María Pardo Álvarez. Explicó que son ya 26 las intervenciones llevadas a cabo dentro del programa ‘Rehabitare’ «desde que en 2016 la Junta  puso en marcha este plan en la provincia burgalesa, y que en su conjunto han supuesto una inversión de 1,2 millones de euros». Cifras que en el conjunto regional -añadió-, «dan lugar a más de 246 casas recuperadas con más de 12 millones de euros de inversión, siendo la previsión del Gobierno regional que se llegue a 484 viviendas y 23 millones de euros los invertidos al final de la legislatura», avanzaba. Pardo ofreció estos datos durante la visita realizada ayer a la obra, donde estuvo acompañada por el delegado territorial de la Junta Roberto Sáiz, y por el alcalde de Villegas José Antonio Ramos. Todos ellos conocieron el remodelado edificio en el que se ha arreglado el tejado que comparten ambas, se han renovado todas las instalaciones de fontanería  y electricidad, creado un nuevo baño, amueblado la cocina y arreglado el patio trasero entre otras muchas labores. El resultado, dos viviendas con 3 habitaciones, salón, cocina, baño y un pequeño patio trasero, siendo cerca de 70 metros cuadrados los que poseen las viviendas. Una de las cuales «pondremos en cuanto podamos a disposición de una familia de cuatro miembros que vive desde hace dos años aquí y que se ha integrado muy bien entre nosotros, mientras que la segunda la conservará el Ayuntamiento para su uso puntual o para alguna urgencia», comentaba el edil.Ramos agradeció a la Junta su ayuda en este proyecto, «que a pesar de estar casi acabado se vio paralizado estos meses por la forzada inactividad a causa del estado de alerta decretado para frenar el Covid-19», explicó, «lo que hace que hoy sólo queden pequeños detalles para acabar esta obra», afirmaba. Ramos hizo hincapié en la ayuda que supone este programa regional, «ya que posibilita recuperar edificios en los que de otra manera los ayuntamientos solos no podemos actuar», confesaba.Y es que si bien la obra la gestionaba a Junta -que ha aportado 48.000 euros-, el Ayuntamiento participó también con unos 3.000 euros de las arcas municipales para cada una de las viviendas con el fin de completar el conjunto. «Como ha sido por ejemplo, modificando el sistema de calefacción para que fuera independiente en cada vivienda, además de haberlas colocado en unas casetas construidas en el exterior», explicó el edil. Y es que como remarcaba Pardo, «la misión de este programa no solamente es rehabilitarlas sino ponerlas a disposición de familias que, de esta forma, se quedan a vivir en el mundo rural», remarcó, recordando que tras el arreglo se ceden al Ayuntamiento local quien, siguiendo unas pautas de fin social, decide las pautas de su alquiler. «A la vez que usamos los medios existentes en el propio medio rural, pues se recuperan edificios de los pueblos -en lugar de hacer casas nuevas-, y se reactiva la economía local pues muchas veces las mejoras las realizan empresas de la zona y la comarca».Ramos se mostraba contento al ver avanzar este proyecto que ya contemplaban en los presupuestos de 2019, convirtiéndolo así en uno de los muchos que se han ido realizando poco a poco. Destaca entre ellos, los vinculados al entorno de la iglesia (un magnífico templo catalogado BIC en el que recientemente intervino la Junta para reparar sus cubiertas sobre todo), a lo que el Ayuntamiento ha sumado la mejora de varias calles cercanas, el asentamiento del muro que completa el entorno del templo o el arreglo del camino al cementerio.«A lo que en breve se sumará el arreglo del camino a la ermita ya adjudicado por 30.000 euros y a punto de iniciarse», avanza el edil.