Memoria de antiguos remedios

Dentro de la prolífica tierra de la Ribera del Duero, mundialmente conocida por su delicioso vino, se enmarca el municipio de Peñaranda de Duero. Un pueblo que encarna la belleza de su historia y fisonomía mezclada con los ricos manjares que produce esta tierra castellana. A tan solo 18 kilómetros de Aranda de Duero podemos disfrutar de sus imponentes construcciones que dan fe de su relevancia pasada.La localidad está custodiada por un majestuoso castillo en lo alto de la peña que corona el pueblo. Esta fortificación debe su construcción al primer Conde de Miranda y, aunque fue abandonado en el siglo XVII, su estado se mantiene con gran vigor y es considerado uno de los castillos mejor conservados de la provincia de Burgos. El espacio más importante del baluarte es la Torre del Homenaje donde se encuentra el Centro de Interpretación de Castillos, en el que podemos disfrutar de la historia de estas construcciones defensivas. Desde la azotea de esta torre se puede disfrutar de la mejor panorámica del municipio que ofrece unas vistas impresionantes. Otro de los conjuntos arquitectónicos del municipio es el Palacio de los Condes de Miranda. Residencia de la familia Avellaneda hasta el siglo XVIII, posee una importante calidad artística. Con un magnífico patio interior con esculturas mitológicas y una fachada plateresca que responde a una de las grandes joyas de este estilo en nuestro país.La Iglesia de Santa Ana, antigua colegiata, es el centro religioso de la localidad. Cuenta con un retablo neoclásico y varias esculturas romanas procedentes de la ciudad romana de Clunia.

Una de las visitas imperdibles en la villa de Peñaranda es su farmacia.  Esta botica cuenta con más de tres siglos de historia y es la farmacia en activo más antigua de España. Ocho generaciones han sido las encargadas de mantener esta profesión familiar. Todavía posee un pequeño huerto en el que en épocas pasadas se plantaban hierbas medicinales. Actualmente puede ser visitada, función que se complementa con la atención al público.En Peñaranda la celebración del día de Santa Águeda es una tradición que viene de lejos. Aunque tuvo que ser recuperada en el año 1992, esta fiesta formaba parte de la tradición del pueblo desde tiempos inmemorables. El día 5 de febrero, las mujeres del pueblo se acercan al ayuntamiento vestidas con trajes típicos para presenciar cómo el alcalde delega sus funciones por un día en la mujer más mayor del municipio. Además, el baile y la alegría están garantizados durante todo el día.Las fiestas patronales en honor a Nuestra Señora de los Remedios se celebrarían el fin de semana del 8 de septiembre con bailes, eventos deportivos y todo tipo de actividades para mayores y pequeños. Este año por culpa de la pandemia del Covid-19 no será posible celebrar estas fiestas como en años pasados.