«La viña da vidilla y ahora que por fin va a llegar la fibra óptica será más fácil el teletrabajo»

 

Pregunta- ¿Cuántos vecinos tiene Pardilla? 

Respuesta- Pues estamos entre 117 y 120. La verdad es que contra toda tendencia por ahora vamos manteniéndonos, que no es poco.

P.- ¿Cuántos viven en invierno?

R.- Unos 80, calculo, pero luego hay que sumar a unas diez familias, que cuando se puede, vienen todos los fines de semana desde Madrid porque tienen casa aquí. 

P.- ¿Qué hace un alcalde como usted en un pueblo como éste?

R.- Pues de todo porque en un pueblo pequeño todos hacemos de todo. Yo me empecé como pastelero, luego estuve en la fábrica de Dulces, que ya cerró, y estuve también unos años de teniente alcalde y de juez de paz.

P.- ¿Qué papel tenía como juez de paz?

R.- Sobre todo firmaba las partidas de nacimiento porque si había algún conflicto, bajaban a Aranda.

P.- Sin tiendas, ¿cómo se apañan?

R.- Bueno, el panadero de Roa viene todos los días. El de ultramarinos viene una vez al mes y el pescadero ahora en invierno, una vez cada quince días y en verano, todas las semanas. Frutero no tenemos pero los sábados, la mayoría aprovechamos para comprar en el mercadillo de Aranda.

P.- ¿Hay viviendas disponibles en alquiler?

R.- Creo que no. Es verdad que con esto del viñedo ha venido gente preguntando para alquilar pero no es fácil.

P.- ¿Con qué presupuesto municipal cuentan?

R.- Unos 150.000 euros, incluidos los 41.000 euros de los planes provinciales que este año, aunque todavía no lo hemos visto con los compañeros, entiendo que destinaremos a pavimentación. El año pasado invertimos parte en este objetivo y reservamos también una partida para el riego automatizado del parque.

P.- Basta dar un paseo para ver que tienen el pueblo muy cuidado.

R.- Tenemos a una persona a tiempo partido, todo el año y hay que reconocer que lo da todo. Luego las casas están, la mayoría, muy bien y eso se nota.

P.- ¿Qué proyectos tiene en mente?

R.- Aprovechando el dinero que no pudimos gastar en fiestas, vamos a arreglar unos caminos. 

P.- ¿De qué vive Pardilla?

R.- Fundamentalmente de la agricultura. Tenemos cultivos, los lechazos de Paradilla 143, la bodega Ricardana y luego hay gente que va a Aranda a trabajar en Glaxo.

P.- ¿Qué falta? 

R.- Pues antes teníamos las dos fábricas de dulces que daban mucha vida porque entre las dos tenían unos 60 puestos de trabajo. Desgraciadamente ya cerraron.

Me encanta la iglesia pero sobre todo me gusta el ambiente que hay en el pueblo. Hay una convivencia fenonemal entre los mayores y los niños

P.- ¿Hay negocios autónomos?

R.- No. Ahora que nos están poniendo la fibra óptica, ¡a ver si se anima alguno!

P.- ¿Cómo va la asistencia médica en Pardilla?

R.- Hemos perdido un día pero ya ocurrió antes de la pandemia. Antes el médico venía los lunes, miércoles y viernes, y ahora viene los lunes y jueves y la enfermera, los martes.

P.- ¿Hay pediatra?

R.- Tenemos un grupito de unos seis niños con edades comprendidas entre 1 y 9 años pero no tenemos pediatra. 

P.- Si tuviera que elegir entre tener consultorio médico o escuela, ¿qué escogería?

R.- Pues, consultorio médico porque los más pequeños ya tienen guardería en Milagros y los mayores, que también tenemos un grupito de entre 16 y 17 años, van a estudiar en autobús a Aranda.

Al final hay que tener en cuenta que aquí no cobramos nada, trabajamos por nuestro pueblo y por nuestra gente. 

P.- ¿Cómo se vive en Pardilla?

R.- Estupendamente. Yo nací aquí, he crecido, trabajado y nunca he necesitado ir fuera. Aunque es cierto que faltan algunas cosas, aquí no tenemos problema. Vivimos tranquilos y eso es mucho.

P.- ¿De qué presume?

R.- Me encanta la iglesia pero sobre todo me gusta el ambiente que hay en el pueblo. Hay una convivencia fenonemal entre los mayores y los niños.

P.- ¿Se siente valorado como alcalde?

R.- Llevo poco tiempo. Yo pienso que sí. Desde luego, tanto los concejales como yo hacemos lo que podemos. Al final hay que tener en cuenta que aquí no cobramos nada, trabajamos por nuestro pueblo y por nuestra gente. 

P.- ¿Qué le parece la denostación de la política?

R.- Bueno aquí no puede haber mucha polémica porque no hay dónde coger (ríe). 

P.- Con un presupuesto tan pequeño será difícil elegir inversiones.

R.- Lo pensamos todo mucho para no tirar el dinero.

P.- ¿Qué le gustaría dejar para la historia?

R.- Que no hablen mal de uno (ríe).

P.- ¿Cómo ve el futuro de la España vaciada?

R.- Complicado, es muy difícil porque cada vez se va a peor pero la verdad es que en Pardilla no nos podemos quejar. La viña da vidilla y ahora que por fin va a llegar la fibra óptica será más fácil el teletrabajo. 

P.- ¿Cuál es el mejor momento para venir?

R.- Cualquiera es bueno pero en fiestas patronales seguro. Hacemos la de Santa Isabel el primer fin de semana de julio y luego, las fuertes, las de San Juan Degollado el último fin de semana de agosto. Ahí vienen grupos bastante buenos, según los jóvenes. Tenemos tres días de fiesta y justo antes celebramos la semana Cultural con teatro, música y cenas en la plaza. El ambiente es buenísimo.