El Correo de Burgos

Trotaburgos

Villamorón, una catedral entre trigales

La iglesia de Santiago Apóstol de Villamorón, uno de los primeros templos góticos de Castilla, emerge imponente en el valle del río Brullés

La iglesia de Santiago Apóstol de Villamorón impone por su magnitud, su altura y su recia arquitectura del primer gótico castellano / DARÍO GONZALO.

La iglesia de Santiago Apóstol de Villamorón impone por su magnitud, su altura y su recia arquitectura del primer gótico castellano. DARÍO GONZALO

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Ya no quedan vecinos en la pequeña localidad de Villamorón. Pero los que siguen residiendo ocasionalmente y los que marcharon hace muchos años se acordarán de que hoy, 25 de julio, celebran a su patrón. Huele a espigas recién cosechadas, a tierra caliente. El sol refulge en lo alto del cielo, azul purísimo, y canta la chicharra. Un tesoro de piedra nos espera entre campos de trigo y girasol: la iglesia de Santiago Apóstol.

El paulatino despoblamiento de este pueblo, como en tantos otros lugares, dejó al albur de la ruina y el silencio esta magna construcción en los años 70. Décadas más tarde, la lucha de la asociación cultural Amigos de Villamorón, creada en 2003, más todos los apoyos que recibió su iniciativa consiguió que el templo fuera restaurado entre 2009 y 2010, labor que costeó la Junta de Castilla y León dentro del Plan PAHIS, que también actuó en las iglesias de las otras ‘villas del Brullés’: Sasamón, Villegas y Olmillos de Sasamón.

Su porte puede tener ciertas semejanzas con algunos otros templos contemporáneos de la provincia, como la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción de Olmos de la Picaza, la colegiata de la Virgen del Manzano de Castrojeriz o la iglesia de Nuestra Señora de los Reyes de Grijalba. Pero su estampa acastillada, erigida sobre unos muros que parecen impenetrables y una torre que simula más un puesto de vigía que un simple campanario, asombra a todo el visitante que la ve por primera vez. Un pequeña catedral en mitad del páramo levantada a mediados del siglo XIII con el esfuerzo de un pueblo y el trabajo de grandes maestros canteros.

La gárgola, uno de los símbolos de la iglesia de Santiago de Villamorón. darío gonzalo

En la actualidad sólo cuenta con una puerta de entrada, en el costado sur, que recibe al visitante con la  sombra agradecida de las acacias que pueblan el atrio. Existen otras dos puertas que fueron clausuradas y tapiadas a lo largo de la vida del templo, al norte y al oeste.

Si su exterior produce pasmo, su interior asombra por su amplitud. Desnudo de muebles, diáfano, impresiona pasear al fresco por sus tres naves, observar las bóvedas policromadas y contemplar los altares que antaño vistieron obras de arte y retablos. Uno de ellos, el de san Joaquín y santa Ana, se puede ver en el Museo del Retablo de Burgos junto a otras dos piezas procedentes de esta parroquia: un recio cristo de rasgos románicos y una cruz procesional de plata del siglo XVI.

Hay dos elementos que siempre quedan en el recuerdo de quien visita esta maravilla gótica: el rosetón y la gárgola. El primero es un primoroso trabajo en piedra que surte de luz desde el oeste a la nave principal por encima del coro. Durante la rehabilitación del templo se hizo una vidriera nueva -la original se había perdido muchos años atrás-, obra del taller burgalés Barrio según un diseño de Antonio de la Fuente, arquitecto de la restauración de la iglesia. La figura demoníaca que hay junto a la puerta principal nos recuerda el simbolismo y la habitual presencia de Lucifer en la escultura religiosa, especialmente en el arte del medievo.

El coro, las bóvedas policromadas y el rosetón del templo de Villamorón.darío gonzalo

La historia de Villamorón siempre ha estado muy vinculada a la cercana Villegas, municipio al que pertenece. La crónicas de ambos lugares siempre han ido unidas a lo largo de los siglos, siendo testigos y actores de la romanización, la etapa visigoda, la repoblación en tiempos de los primeros condes de Castilla... hasta llegar a la Edad Media, en la que dos poderosas estirpes dejaron su huella de riqueza y poder en estas tierras del noroeste de la provincia: los Villegas y los Velasco, dos familias de gran relevancia en la historia de Burgos y más allá.

Visitas

Desde el pasado 16 de julio hasta el 5 de septiembre, las iglesias de Santiago Apóstol de Villamorón y Santa Eugenia de Villegas están abiertas de viernes a domingo, de 12 a 14 horas y de 18 a 20 horas, dentro del programa de apertura de monumentos de la Junta de Castilla y León y el arzobispado de Burgos. Un buen momento para conocer y disfrutar de estas imponentes joyas de la arquitectura gótica burgalesa, ambas declaradas Bien de Interés Cultural, así como los pueblos y gentes que las cuidan y veneran, siempre con loables planes entre manos para seguir dignificando el patrimonio de su tierra.

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