Sinovas intentará recuperar las puertas de San Nicolás de Bari

Tras conocer que la Junta de Castilla y León ha decidido no comprar las puertas del retablo de San Nicolás de Bari, ante la inesperada subida del precio de venta, el alcalde de Sinovas no se rinde. «Vamos a analizar todas las opciones para recuperarlas», advierte el regidor, Miguel Ángel Gayubo.

Aunque coincide en que no se puede comprar «al precio que sea», porque «no sería lógico», el alcalde no renuncia a recuperar el legado perdido. «Vamos a hacer todo lo posible», garantiza.

La subida ha sorprendido a todos, si tenemos en cuenta que en la subasta de diciembre de 2020 no despertó el interés de ningún comprador.

En opinión del alcalde, el incremento puede responder a una estrategia de la parte vendedora al conocer que la administración estaba interesada. «Es lo único que podría tener sentido», analiza sin perder la esperanza. «Al menos sabemos dónde están».

«Es lo único que podría tener sentido», analiza sin perder la esperanza. «Al menos sabemos dónde están»

Desde que se localizaron las puertas, tanto Sinovas como Aranda de Duero han hecho lo posible por recuperarlas, junto a la Junta de Castilla y León. Como primer paso intentaron paralizar la puja abriendo una investigación policial que, sin embargo, no apreció irregularidades en la venta.

Con la subasta ultimándose llegaba el precio de salida, 90.000 euros, pero lo cierto, es que el vendedor tampoco lo tenía fácil ya que, al no contar con el permiso del Estado, las puertas no se podían exportar; todo un problema para cualquier comprador.

De haber surgido un comprador, la Junta de Castilla y León podía haber ejercido el derecho de tanteo para recuperar la pieza pero no se dio la oportunidad y contra todo pronóstico, en lugar de bajar el precio, ha subido. Hoy la Casa de Subastas podría estar ultimando una nueva convocatoria pero por ahora «no hay fecha».

De haber surgido un comprador, la Junta de Castilla y León podía haber ejercido el derecho de tanteo para recuperar la pieza pero no se dio la oportunidad

Según constaba en la subasta de la Casa Abalarte, se trata de una pareja de puertas renacentistas en madera tallada, policromadas por ambas caras, que datan entre los años 1510 y 1520.

Entrados en detalle, cada puerta mide 370 x 134 cm y está divida en nueve paneles moldurados siendo el central en horizontal.

Cada panel está decorado con motivos vegetales y criaturas míticas, con una roseta central rodeada con corona de laurel. En el centro, hay un escudo de armas tallado de la familia Fonseca, en campo de oro y cinco estrellas de gules coronados por capelo del que cuelgan tres borlas a cada lado.