Aranda de Duero se convierte cada mes de agosto en epicentro de todas las miradas con Sonorama Ribera, un festival de música único en España. El buen ambiente está asegurado también en los pueblos de alrededor. Estos son algunos de los pueblos más bonitos de la Ribera.
Si buscas aventura, la vía ferrata de Huerta de Rey es una súper opción.
¿Imaginas como vivían los Hobbit del Señor de los Anillos? si quieres comprobarlo pasa una tarde en Zazuar, un pueblo que huele a sarmiento, chuletillas y vino de Ribera del Duero.
Caleruega puede presumir de ser uno de los pueblos más bonitos de España.
A la espera de que inauguren sus impresionantes piscinas, la Iglesia de Gumiel de Izán es una de esas cosas que hay que ver al menos una vez en la vida.
Ponte en situación. Es agosto, hace mucho calor y tus hijos quieren plan. La mejor opción es el pinar de Fuentecén y su recién estrenado parque infantil. El ambiente está asegurado.
Si quieres completar la experiencia sonorámica con aventura, el Circuito de Kotarr es una gran alternativa.
Terminados los conciertos, hay pueblos como La Vid que merecen una escapada. Si te quieres relajar a pocos metros hay un restaurantes y hasta un spa.
El Museo de los Aromas de Santa Cruz de la Salceda en Burgos te desafía con una propuesta única en Europa.
Peñaranda es uno de esos pueblos mágicos de la Ribera. Este verano hay visitas teatralizadas y coincidiendo con Sonorama, una Noche de Monólogos.
Huerta de Rey te propone una ruta del Coco, de mucho miedo.
No hay mejor plan para terminar Sonorama que tomando un vino viendo atardecer en Haza.