Orbaneja del Castillo. Belleza esculpida entre las rocas

Orbaneja del Castillo es una localidad ubicada al noreste de la provincia, en el límite con Cantabria, que destaca por estar entre uno de los pueblos más bellos de Burgos, gracias a un entorno natural privilegiado y por contar con unas cascadas espectaculares integradas en la trama urbana.

El nombre de la localidad de patente que hubo un castillo, pero no hay restos que den cuenta de su presencia, que puede retrotraerse al  siglo XIV. Orbaneja aún guarda vestigios de la presencia mozárabe, cristiana y judía. Tuvo un gran esplendor en los siglos XII y XII, cuando por allí pasaba el camino de Santiago, y donde paraban peregrinos en su convento y hospital. Si se recorre el casco urbano, que fue declarado Bien de Interés Cultural (BIC) en el año 1993, se puede contemplar ese legado de una localidad íntimamente ligada al extraordinario entorno que la rodea, marcado por el increíble Cañón del Ebro. En esa visita por el corazón de la localidad se puede disfrutar de edificios como la Casa Fuerte.

Se trata de una edificación que se eleva sobre una roca, y que pudo pertenecer a los marqueses de Aguilar. Otros de los edificios singulares que se pueden contemplar en la visita a Orbaneja es la conocida como Casa de los Pobres, que fue un antiguo en el siglo XVI. Se trata de uno de los ejemplos de este tipo de arquitectura más antiguos de la zona. También merece la pena la Casa de los Canes. Todo el casco histórico de Orbaneja del Castillo es un excelente ejemplo de arquitectura popular. A lo que se añade el excelente estado de conservación , lo que lo convierte en uno de los más atractivos de Castilla y León. Como no puede ser de otra manera, la cercanía con la comunidad de Cantabria hace que las casas se arquitectura montañesa, con solanas de madera que jalonan el paseo de los visitantes por el entramado urbano que se ha adaptado al escarpado entorno. 

La naturaleza es esencial en el conjunto paisajístico que conforma Orbaneja del Castillo. Y la cascada es el referente de la localidad, uno de los motivos principales por los que se visita. En época de deshielo resulta aún más espectacular su contemplación, así como poder abstraerse mientras se escucha el sonido de la caída del agua durante más de 20 metros de desnivel. Y sus pies se pueden ver las tobas calcáreas.

El agua parte de la conocida como Cueva del Agua, una cavidad que está ubicada en la parte alta de la localidad y que está dividida en dos partes, Villa y Puebla. Es parte del complejo kárstico de Orbaneja y da salida a las aguas de un gran acuífero ubicado en el subsuelo del páramo de Bricia. Es una cavidad que se puede visitar con guía y que se une a la cueva del Níspero y la cueva del Barbancho. 

Las Eras de Orbaneja del Castillo es otra de las zonas que merece la pena visitar. Son campos de cultivo ubicados en la paramera sobre el valle. Junto a ellas, hay una treintena de chozas de piedra que se utilizaban como graneros.