Adolescentes sin planes. El centro de Arte Joven de Aranda se retrasa hasta el próximo otoño

Aunque la obra del centro de Arte Joven de Aranda finalizó hace más de un año y el proyecto de reconstrucción se ha demorado durante una década, el pliego para contratar a la empresa que gestionará el espacio juvenil todavía no está listo. La Concejalía ha presentado el borrador esta mañana en la comisión de Juventud, pero es un primer boceto. Ahora falta que los grupos políticos de la oposición aporten sus mejoras y que la administración remate una tramitación que suele ser lenta. “Esperamos abrirlo ya con normalidad en otoño”, apunta la concejala del área, Teresa Bermejo.

Según adelanta, la idea inicial es que el espacio abra 16 fines de semana al año, dentro de la temporada otoño- invierno. Aunque habrá actividades y talleres, el centro de Arte Joven aspira a convertirse en punto de encuentro para los adolescentes y jóvenes de la ciudad. Por ello, contará con mesas de juego, como billares o mesas de ping-pong; máquinas expendedoras de bebidas sin alcohol y aperitivos, y por supuesto, Wifi gratuito y libre para todos.

En la comisión algunos grupos de la oposición han planteado mejoras como un posible aumento del horario inicial, que por ahora se establece, los viernes y sábados de 19.30 a 23.00 horas. “En la comisión hemos acordado dejar unos días para que los grupos de la oposición presenten sus propuestas porque esto no es un proyecto de un partido, aquí debemos estar todos”, sostiene la concejala.

Una de estas mejoras plantea crear un grupo de trabajo con las asociaciones juveniles y las asociaciones de Padres y Madres (Ampas). “Nos ha parecido una buena idea”, asegura.

Aforo de 100 personas

El canon que el Ayuntamiento pretende pagar a la empresa adjudicataria  es de 33.600 euros anuales, a razón de 2.100 euros cada fin de semana (más IVA). El aforo del centro de Arte Joven rondará las 100 personas y el acceso para todos los jóvenes será gratuito siempre.

En cuanto al programa de actividades la concejala asegura que está abierto a la espera de volver a reunirse con las asociaciones juveniles y las Ampas. “En su día nos reunimos con ellas pero queremos actualizarlo todo para ajustarnos lo máximo posible a los gustos de los jóvenes de hoy”, defiende.

Las actividades no son obligatorias. “Los jóvenes podrán estar allí con sus amigos. Si quieren unirse a una actividad perfecto, pero si no podrán estar allí igual”, garantiza.

Lo cierto es que mientras los políticos se mueven y la administración tramita, los adolescentes de Aranda de Duero no tienen a dónde ir y están condenados a deambular por las calles ante la falta de alternativas de ocio. Ya lo decían el pasado 5 de febrero en este periódico: están “hartos de pasar frío” y de no tener opciones más allá de grabar tik toks, comer pipas y hacer botellón.