Un mural de 156 metros para recordar los bailes del frontón de Aranda

156 metros de tapia para revivir una época dorada de Aranda, esa en la que la música y el baile fueron protagonistas. La nueva calle Virgen del Carmen, que pronto se convertirá en plaza del Frontón, viaja al pasado,  gracias al arte de Nano Lázaro, y rinde homenaje al antiguo Frontón, un espacio que durante años fue punto de encuentro social.

Todas las señoras de “cierta edad” se casaron ahí

En la inauguración, la alcaldesa, Raquel González, ha estado acompañada por el artista encargado, Nano Lázaro, y una emocionada María Ángeles Montero, viuda del último propietario de este mítico espacio, Jesús Samaniego. “Yo no le vivido pero ha sido parte mi familia. Lo llevaban mis cuñados, mi suegro y mi marido… era un sitio emblemático. Si preguntas a las señoras de cierta edad todas se casaron aquí, luego estaba el baile y el vermut con la orquesta. Me encanta esta idea del mural porque así cada vez que pasemos nos acordaremos”, agradece.

A la hora de rebautizar a esta plaza, la alcaldesa se ha inspirado además en la novela Virgen de los huesos, de Guillermo Galván, ya que la trama comienza precisamente en una discusión en el Frontón en 1936.

“Somos todos hijos del Frontón”

A la hora de realizar el mural, Nano ha recopilado fotos antiguas, prensa histórica y testimonios de vecinos. “Era algo muy moderno, con grandes salones, un parque bastante bonito, juegos de pelota donde se realizaban competiciones de nivel, pero sobre todo era baile. Como me dijo una vecina el otro día, somos todos hijos del Frontón”, ríe.

En el recorrido por estos 156 metros de añoranza destacan personajes como el trompetista Alberto Espinosa, que tocó con Antonio Machín en América y “revolucionó el espectáculo”, la histórica orquesta Rubí o el último propietario, Jesús Samaniego.