Águila Sagardía. El águila asoma desde las alturas del puerto de Carrales en honor a las víctimas de esta columna caídas en el frente norte. En un libro editado en 1940 el general Sagardía dejó escrito: «Les prometí a mis muchachos dos cosas para realizarlas al final de la guerra: un monumento y un libro. El monumento ya está elevado en tierras de La Lora, tan pródigamente regadas con su sangre». FOTOS: © ECB / Darío Gonzalo
Altar Falange. Bajo la leyenda ‘Caídos de la 1ª bandera de F.E -Falange Española- de Palencia. presentes», en recuerdo a los falagistas que cayeron en enfrentamientos con las tropas republicanas en la zona de Bricia. Se uso para misas de campaña y se ve desde la carretera, a un kilómetro del Águila. FOTOS: © ECB / Darío Gonzalo
Altar Falange. Bajo la leyenda ‘Caídos de la 1ª bandera de F.E -Falange Española- de Palencia. presentes», en recuerdo a los falagistas que cayeron en enfrentamientos con las tropas republicanas en la zona de Bricia. Se uso para misas de campaña y se ve desde la carretera, a un kilómetro del Águila. FOTOS: © ECB / Darío Gonzalo
Altar Falange. Bajo la leyenda ‘Caídos de la 1ª bandera de F.E -Falange Española- de Palencia. presentes», en recuerdo a los falagistas que cayeron en enfrentamientos con las tropas republicanas en la zona de Bricia. Se uso para misas de campaña y se ve desde la carretera, a un kilómetro del Águila. FOTOS: © ECB / Darío Gonzalo
Pirámide italianos. Se trata de una pirámide escalonada que se alza a pocos metros de la N-623 en lo alto del puerto del Escudo en Valle de Valdebezana. Se asoma al pantano del Ebro desde las alturas y está muy próxima al límite con Cantabria. Es un mausoleo a los soldados caídos de esa nacionalidad en el bando franquista. Pertenece al gobierno italiano que hace décadas que exhumó los restos y la despojó de simbología fascista. Su interior circular eleva hasta el techo los 360 nichos de los soldados voluntarios italianos. Bajo tierra, una cripta servía para el reposo de los oficiales. FOTOS: © ECB / Darío Gonzalo
Pirámide italianos. Se trata de una pirámide escalonada que se alza a pocos metros de la N-623 en lo alto del puerto del Escudo en Valle de Valdebezana. Se asoma al pantano del Ebro desde las alturas y está muy próxima al límite con Cantabria. Es un mausoleo a los soldados caídos de esa nacionalidad en el bando franquista. Pertenece al gobierno italiano que hace décadas que exhumó los restos y la despojó de simbología fascista. Su interior circular eleva hasta el techo los 360 nichos de los soldados voluntarios italianos. Bajo tierra, una cripta servía para el reposo de los oficiales. FOTOS: © ECB / Darío Gonzalo
Pirámide italianos. Se trata de una pirámide escalonada que se alza a pocos metros de la N-623 en lo alto del puerto del Escudo en Valle de Valdebezana. Se asoma al pantano del Ebro desde las alturas y está muy próxima al límite con Cantabria. Es un mausoleo a los soldados caídos de esa nacionalidad en el bando franquista. Pertenece al gobierno italiano que hace décadas que exhumó los restos y la despojó de simbología fascista. Su interior circular eleva hasta el techo los 360 nichos de los soldados voluntarios italianos. Bajo tierra, una cripta servía para el reposo de los oficiales. FOTOS: © ECB / Darío Gonzalo
Águila Sagardía. El águila asoma desde las alturas del puerto de Carrales en honor a las víctimas de esta columna caídas en el frente norte. En un libro editado en 1940 el general Sagardía dejó escrito: «Les prometí a mis muchachos dos cosas para realizarlas al final de la guerra: un monumento y un libro. El monumento ya está elevado en tierras de La Lora, tan pródigamente regadas con su sangre». FOTOS: © ECB / Darío Gonzalo
Águila Sagardía. El águila asoma desde las alturas del puerto de Carrales en honor a las víctimas de esta columna caídas en el frente norte. En un libro editado en 1940 el general Sagardía dejó escrito: «Les prometí a mis muchachos dos cosas para realizarlas al final de la guerra: un monumento y un libro. El monumento ya está elevado en tierras de La Lora, tan pródigamente regadas con su sangre». FOTOS: © ECB / Darío Gonzalo