Dos investigados en Arlanza por usar gasóleo bonificado en vehículos no autorizados
La Guardia Civil intensificará los controles para evitar que prolifere este práctica fraudulenta
La Guardia Civil de Burgos ha levantado dos actas en la comarca de Arlanza por la utilización como combustible de gasóleo bonificado tipo B en vehículos no autorizados cuando el uso del citado carburante está dirigido principalmente a la maquinaria agrícola.
El último caso de detectó en la mañana del pasado martes 20 junio cuando, minutos antes del mediodía, se daba el alto a un conductor de un vehículo en la carretera N-234 al que se le realizó la prueba para verificar el tipo de carburante suministrado. Sorpresivamente, la primera extracción arrojó una tonalidad rojiza, característica del gasóleo bonificado tipo B.
Las siguientes muestras que se obtuvieron reiteraron la misma pigmentación, siendo depositadas en envases precintados y autentificados para su posterior análisis, que han sido enviadas junto con el acta denuncia a la Dependencia Provincial de Aduanas e Impuestos Especiales de Burgos.
En las últimas semanas, se ha llevado a cabo en la comarca del Arlanza una intensificación de estos controles dirigidos a la verificación de combustible utilizado por vehículos no especiales bajo sospecha de un uso indebido.
En lo que va de mes, dos conductores han sido sorprendidos en la comarca cuando conducían vehículos no autorizados para el uso de este carburante bonificado. El otro caso fue detectado la semana pasada en un camino terrizo. Según fuentes del Instituto Armado, el propietario del turismo reconoció haberse surtido del depósito agrícola de una explotación ganadera donde trabajó.
El origen del mismo, mayoritariamente, hay que buscarlo en el destinado a uso agrícola; pero también hay un porcentaje que puede provenir de su introducción en el mercado negro, muchas veces fruto de una sustracción previa del interior de los depósitos de combustible de la maquinaria de obras y también de la agrícola.
La Comandancia de Burgos investiga su procedencia para determinar el origen del carburante e incrementará este tipo de servicios dirigidos a la prevención y a la erradicación de estas prácticas fraudulentas.
Para este tipo de infracciones se contemplan sanciones económicas que varían entre el doble y el cuádruple del valor de la cantidad defraudada y se tendrá en cuenta la medida de combustible que porta en el depósito, la motorización y la cilindrada del vehículo.