Cuatro incendios provocados en el norte de Burgos en la misma semana

El norte de Burgos se enfrenta de nuevo a una oleada de incendios en pleno invierno. A lo largo de esta semana, los puertos de montaña de La Sía, Lunada y Estacas de Trueba, ubicados en el término municipal de Espinosa de los Monteros, han registrado cuatro siniestros. Los cuatro, tal y como se ha podido acreditar, fueron provocados. 

Según ha podido saber este periódico, las investigaciones sobre el terreno apuntan a malas prácticas relacionadas con la «eliminación de matorral» para favorecer la «regeneración de pastos». Una acción sumamente peligrosa que ya ha causado siete incendios en la zona desde que empezó el invierno. 

El último incendio de esta semana, declarado el jueves en Estacas de Trueba, permanecía activo a última hora del viernes con unos 50 metros de frente. Teniendo en cuenta que las llamas se propagaron por zonas completamente inaccesibles para dotaciones terrestres, fue necesario movilizar un helicóptero desde Zamora al requerirse un «ataque directo» por aire. De esta forma, se logró acotar el fuego  tras evitar que se extendiese a un valle con regeneración de hayedo. 

Se sabe que este siniestro, el más grave de los cuatro, supera las 80 hectáreas dañadas. El resto, provocados entre el martes y el jueves, oscilan entre dos y cinco hectáreas. En cuanto a la intencionalidad, verificada durante los trabajos de extinción, cabe resaltar un patrón que se repite en casi todos los casos: las llamas 'aparecen' a partir de las 7 o las 8 de la tarde. Es decir, cuando ya ha oscurecido. 

Bajo mínimos

Estos cuatro incendios evidencian una vez más la escasez de medios materiales y humanos fuera -sobre todo- de la época de riesgo alto. La Asociación Profesional de Agentes Medioambientales de Castilla y León (Apamcyl) lleva tiempo denunciando esta situación y el jueves volvió a ponerlo de manifiesto a través de las redes sociales. De esta forma, el sindicato trata de instar al consejero de Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, a «atajar el problema de la intencionalidad» de una vez por todas. 

También lamenta Apamcyl que Burgos cuente en estos momentos con tan solo dos agentes de guardia para toda la provincia. El lunes, sin ir más lejos, había un efectivo disponible en Espinosa y otro en Aranda de Duero. De punta a punta. 

Conforme avanzaba la semana, se han ido sumando a los operativos de extinción en el entorno de Espinosa agentes de guardia de Sedano, Oña, Villarcayo e incluso Ibeas de Juarros. El problema, más allá de la nula dotación de medios, reside en que los compañeros que prestan servicio en zonas alejadas de Las Merindades desconocen totalmente las características del terreno.