Savia nueva en COAG Burgos: «Los jóvenes somos imprescindibles a la hora de tomar decisiones en el campo»

Se ha criado en la explotación agraria de su familia. Le dio por estudiar Ciencias Políticas, algo que a priori poco tiene que ver con el campo. Sin embargo, a Diego Saldaña le apasionan ambos mundos. Por eso en 2022 se incorporó a la actividad agraria sin dejar de lado su formación académica. Y ahora, con 25 años recién cumplidos, acaba de ser elegido como nuevo coordinador de COAG Burgos. Así lo determinó este viernes la sexta Asamblea Provincial del sindicato celebrada en Castrillo del Val. En su Junta Directiva, la savia nueva marca la pauta del camino a seguir durante los cuatro próximos años.

Oriundo de Orbaneja Riopico, Saldaña empezó con trigos y cebadas. Este año apuesta también por el girasol y los guisantes. Desde siempre, ha contado con un mentor excepcional: su abuelo. «Me ha estado guiando y asesorando en todo momento. Se lo debo todo a él». Del mismo modo, agradece la ayuda de COAG cuando se personó por primera vez en sus oficinas para pedir información. «Conocí a Mónica y vi que la labor de los técnicos es imprescindible. Son el motor de los sindicatos», reconoce.

Saldaña asume ahora una enorme responsabilidad, pero se le ve tranquilo y con las ideas claras. Reconoce, no obstante, que «vamos un poco a ciegas, pero con ilusión, con ganas y el esfuerzo y apoyo de todos nosotros podremos afrontar los problemas que tengamos en el futuro». Y no serán pocos, eso seguro, tal y como está el patio.

Consciente de que asume las riendas de una organización histórica en un momento «muy difícil» para la agricultura y la ganadería, Saldaña es consciente de que «hay que ir con pies de plomo». No en vano, considera que «los jóvenes somos imprescindibles a la hora de tomar decisiones en el campo». Entre otras cosas, porque son una rara avis en un sector cada vez más envejecido. Las incorporaciones, bien lo sabe, brillan por su ausencia porque «como no tengas una financiación externa o familiar es inviable». El objetivo, por lo tanto, es cambiar este paradigma para garantizar una mayor igualdad de oportunidades.

En un contexto de movilizaciones que se extiende por toda Europa y al que España «llegó muy tarde», el nuevo coordinador provincial de COAG cree que «hay que ser muy concreto con lo que se reivindica». Para ello, se necesita una unidad de acción que debe iniciarse desde la base. Esa debe ser, y en ello centrará sus esfuerzos, la «fortaleza de nuestro sindicato». Así pues, se compromete a «impulsar la figura de los delegados comarcales para tener una idea común». Porque al final, en un territorio tan extenso, «el que está en Las Merindades no sabe los problemas que hay en Arlanzón» y viceversa. 

Acaba de aterrizar. Con los pies en la tierra aunque dispuesto a dejarse la piel sobre el terreno. Paso a paso, insiste en la idea de que «está bien que los sindicatos se rejuvenezcan». Dispuesto a «aprender» y «ganar experiencia» aportando sus conocimientos en Ciencias Políticas, espera que la «incertidumbre» que hoy impera en el campo español se disipe lo antes posible. Mientras tanto, afrontará esta nueva andadura de COAG Burgos en compañía de Rafael Fontaneda, Gabriel Román, Ana Isabel Vallejo, Cristian Martínez (su antecesor), Daniel García, Roberto Pérez, Rodrigo Sadornil y José Manuel García.