Trotaburgos
Anguix, el carácter de la Ribera
Los viñedos rodean la localidad enclavada en el corazón de la Ribera burgalesa. Un lugar donde se puede disfrutar de un paseo entre las vides gracias al sendero ' Entre vaso y espaldera '
A 78 kilómetros de Burgos, 27 de Aranda de Duero y 6 de Roa encontramos la localidad de Anguix. Un caserío encaramado en una pequeña loma, donde destaca su iglesia parroquial Nuestra Señora de la Asunción.
Nos cuenta la historia que en el año 1143 Alfonso VII fue quien concedió el fuero de Sepúlveda, en la cercana Segovia. En aquel momento dota la Comunidad de Villa y Tierra de Roa, siendo Anguix una de sus 33 aldeas.
Ligada desde siempre a Roa, con jurisdicción de señorío ejercida por el Duque de Siruela, quien nombraba su alcalde ordinario. Como curiosidad, en el año 1752, el Catastro del Marqués de la Ensenada marca el cambio de su nombre. Consta ya como Anguix, dejando atrás el primitivo vocativo acabado en s.
Los últimos datos del censo recoge 151 vecinos, de los que casi la mitad, un 47 por ciento, han llegado de Marruecos, Rumanía y Bulgaria. Una localidad en el que se deja notar el carácter de la Ribera del Duero, donde las viñas forman paisaje y marcan la estampa de la localidad.
Pero antes de centrarnos en la riqueza de las vides caminemos por sus calles. La tranquilidad de este municipio y sus casas de piedra nos llevan hasta la iglesia parroquial de Nuestra Señora de la Asunción. Un templo del Siglo XVIII que es su imagen más destacada. Cuentan las crónicas que en su construcción los fieles colaboraron económicamente, como también sucedió en otros templos cercanos como el de la Horra.
La edificación del templo parroquial supuso elevadas sumas cuyo pago hipotecó sus bienes y obligó a contribuir a los vecinos con su trabajo y generosos donativos.
En nuestro paseo también merece la pena conocer la ermita de San Juan, edificada en 1737, se sitúa en lo alto del cerro donde abundan las bodegas y ha sido restaurada en 1995 por la Asociación de Amigos de San Juan. Un lugar especial para los anguiseños que profesan una gran devoción por los santos allí presentes: San Juan Bautista, La Virgen del Carmen y San Isidro.
Anguix destaca por sus fiestas patronales en honor a San Juan. Cada 24 de junio, así como el fin de semana que esté más cerca de esa fecha, se celebra la procesión en la que los vecinos acompañan al patrón a ritmo de dulzainas.
Las viñas rodean la localidad, por ese motivo decidieron poner en marcha el sendero que bajo en nombre de Entre Vaso y Espaldera, invita a pasear practicando senderismo a través de los viñedos ribereños. Un sendero señalizado entre la campiña, de 8 kilómetros y medio que se puede recorrer en unas dos horas. La dificultad de la caminata es baja y se recomienda realizar la ruta sobre todo en primavera y otoño. Los últimos kilómetros del camino está salpicado de grupos de chopos, pinos y frutales que son fieles testigos del pasado.
El lugar tiene alma de vino, abierta al turismo de enología para conocer algunas de las bodegas con más renombre de la Ribera burgalesa. Bodegas Tarsos lleva en Anguix desde 1998. Fue una propuesta pionera, ya que el edificio principal se alzó a modo de château, recordando el estilo Burdeos. 70 hectáreas de viñedo propio en las que se cultivan las variedades Tinta del país y Cabernet sauvignon. Bodegas Tarsus ha sido seleccionada como una de las veinte mejores experiencias turísticas de Castilla y León por nuestra experiencia TARSUS ENTRE VID Y BICI.
No es la única, ya que Anguix acoge también los viñedos y bodegas Aster. La bodega, levantada en el año 2000, se encuentra adosada a una casa solariega desde cuya nave de elaboración se divisa el viñedo. La vid se cultiva en espaldera con producción de Tinta del País, en un terreno arcilloso.
Cerca camino a la Horra hay en marcha un interesante proyecto del Grupo Roda, consolida su apuesta por la Denominación de Origen Ribera del Duero con la construcción de una bodega de diseño por Carmen Pinós, premio Nacional de Arquitectura 2021. La filosofía es clara: respetar el paisaje sin estridencias, creando casi una “simbiosis con la tierra”. Bodegas Roda, tiene su origen en Haro, La Rioja, pero hace 15 años eligieron La Horra para crecer en la Ribera. Su apuesta de futuro está ligada a los hermanos Pedro y Pablo Balbás, que aportaron viñedos viejos para hacerse con el 10% del nacimiento de lo que desde entonces es Bodegas La Horra.