El Museo de Burgos incorpora unas cerámicas altomedievales de los siglos VIII y IX
Las piezas se encontraron durante una obras que se realizaron en Lodoso (Burgos) y se podrán visitar hasta el próximo 29 de septiembre
El Museo de Burgos, gestionado por la Junta de Castilla y león, incorpora a su exposición de Nuevos Ingresos un conjunto de cerámicas altomedievales que fueron halladas al llevar a cabo unas obras en Lodoso, localidad perteneciente al término municipal de Pedrosa de Río Úrbel, en Burgos. El objetivo de las actuaciones era adecuar y ensanchar la calle trasera de la iglesia de San Cristóbal, así como la construcción de un muro de contención, tal y como explican desde la Junta.
Debido al movimiento de tierra provocado por las palas excavadoras, se descubrieron varias piezas que motivaron la consecuente intervención arqueológica. Estas se encontraban en el interior de un silo subterráneo que se empleaba para el almacenamiento de cereales.
Las piezas recuperadas se componen de un pequeño conjunto cerámico y de restos faunísticos. En la colección se encuentran varias vasijas completas, algo excepcional, que representan ejemplos de los utensilios de cocina usados en las poblaciones rurales altomedievales. Se fabricaron a torno y muestran una decoración característica con líneas paralelas. A ello hay que añadir tres objetos de industria lítica, una de sílex y las otras dos en cuarcita, y un utensilio realizado en hueso.
Para su datación se analizaron con técnicas de termoluminiscencia dos muestras de cerámica. Es la primera vez que se aplica un análisis de estas características a piezas de la colección del Museo de Burgos de esta cronología. Con ello se ha podido determinar que el marco temporal en el que se ubican abarca los siglos del VIII al IX. Esto supone que servirán como referencia para datar y contextualizar otros hallazgos futuros de este mismo periodo.
En otros yacimientos de la provincia de Burgos, los estudios arqueométricos establecen la datación de cerámicas similares en fechas un poco posteriores, como ocurrió con las localizadas en la población de Castrojeriz, con una cronología situada entre los siglos IX y X. Por eso este descubrimiento es de gran importancia, ya que demuestra un poblamiento altomedieval anterior a la fecha de 1185 en la que el caserío de Lodoso es citado en las fuentes históricas.
En la sección de Nuevos Ingresos se exponen temporalmente piezas destacadas que han incorporado recientemente a la colección, pero que todavía no pueden añadirse a la exposición permanente. En este caso, el conjunto se ha restaurado en el taller del propio museo y se podrán visitar hasta el próximo 29 de septiembre.