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Caja de Burgos programa la apertura del Interclub para antes de fin de año

Las obras del centro de ocio y cultura de la entidad de ahorro ya están finalizadas

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Burgos

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LORETO VELÁZQUEZ / Aranda

Finalizadas ya las obras del Interclub Caja de Burgos, la entidad ultima la inauguración a la espera de que ésta se puede celebrar antes de que acabe el año. Así, el proyecto que se gestó con el objetivo de convertirse en centro neurálgico de la actividad social y cultural de la capital ribereña cobrará forma en el número 2 de la calle Pisuerga, en el Polígono Industrial Allendeduero. «La localización responde a que es el barrio más populoso de la ciudad y con menos dotaciones sociales», explica la responsable de Comunicación quien recuerda que el solar estaba destinado en un principio a un cine que nunca se llegó a materializar.

Bajo esta perspectiva, el Interclub es un centro versátil de más de 1.500 metros cuadrados que ofrecerá ocio, cultura, gastronomía y deporte y que dispondrá, entre otras dotaciones de un gimnasio, sala de fitness, mediateca, taller de cocina, sala de juegos, de informática así como un taller de manualidades, una sala de usos múltiples y otra de cóctel donde se servirán bebidas saludables. «La programación será continua», subraya.

Para poder utilizar estas instalaciones, los usuarios deberán ser clientes de la Caja y hacerse además socios. En cuanto a las tarifas, existirá un abanico amplio de precios que incorporará descuentos según la vinculación de cada usuario con el banco. La titularidad de socio abrirá además las puertas de los tres interclubes abiertos hasta el momento. Y es que, Caja de Burgos cuenta con otros dos centros similares en la ciudad de Burgos y en Miranda. «Era un compromiso que teníamos con Aranda y complementa la apuesta importante que Caja de Burgos inició en el año 2005 con el centro cultural de la Obra Social de la calle Isilla», explica al destacar que «Caja de Burgos es líder en la zona sur y cuenta con 15 oficinas en la comarca de la Ribera».

El proyecto se remonta al año 2006 cuando la entidad decidió transformar los clubes de jubilados en un concepto intergeneracional. Dieron así paso a espacios multidisciplinares abiertos para toda la familia que bajo el lema «Me relaciono, me cuido, me divierto» cobrará forma en Aranda un ambicioso proyecto que ha contado con un presupuesto de 3.600.000 euros.

Durante el proceso muchas cosas han cambiado y con el propósito de dedicar todo el espacio a la obra social, los promotores descartaron las viviendas que se habían planificado en un principio. Además, para acabar con los problemas que se habían presentado con el sótano, Caja de Burgos decidió establecer todo en una sola planta.

El arquitecto burgalés responsable del proyecto es Jesús Arribas quien apostó por la modernidad de un inmueble que no olvida la funcionalidad ni el diseño.

Auditorio

Pero hasta que el interclub abra sus puertas, el auditorio de la Caja de Burgos reserva para otoño una programación musical en la que destaca la actuación de Pastora Soler (5 de noviembre), Nena Daconte (19 de noviembre) y Jimmy McGee & The Praying Hands (21 diciembre).