El tripartito apuesta por rehabilitar a fondo la plaza de La Virgencilla

LORETO VELÁZQUEZ / Aranda

Decididos a poner en valor la céntrica plaza de La Virgencilla, el tripartito que actualmente forma equipo de Gobierno en el Ayuntamiento de Aranda baraja la posibilidad de llevar a cabo un proyecto de envergadura que con un presupuesto de 190.000 euros deje la zona en consonancia con la plaza de la Constitución.

Los concejales de Servicios y Urbanismo, Javier Rojas y José Ignacio Díez Arranz, buscan así armonizar el centro de la ciudad que se completará con el adecentamiento futuro de los Jardines de Don Diego. El nuevo proyecto reserva cambios en la estética y también en la funcionalidad, y bajo esta nueva perspectiva, la plaza será peatonal al completo por lo que se vallará todo el perímetro para impedir el acceso de vehículos. De esta forma, el nuevo proyecto suprime la posibilidad de que los autobuses apeen a sus viajeros en un carril habilitado, como se planteó en un principio. «Aunque nos pareció buena idea, en una recreación virtual hemos visto que sería difícil dar la curva», explica el concejal Javier Rojas, quien asegura que se buscará una solución al apeadero en los Jardines de Don Diego.

Se mantiene eso sí, la intención de eliminar el paso de cebra de La Moderna, una medida que el concejal de Urbanismo, José Ignacio Díez Arranz, presentó con el objetivo de aligerar el tráfico de una de las principales calles deAranda. Si fuese necesario, el Ayuntamiento habilitaría además un nuevo paso de cebra a la altura del bar Silviano.

En cuanto a los plazos, lo más probable es que la obra de acondicionamiento comience después de Navidad. Por el momento, la plaza permanecerá cerrada al tráfico de transeúntes hasta el lunes a la espera de que el hormigón se seque.

En cuanto a la propuesta del grupo socialista en la que su portavoz, Luis Briones, instaba al equipo de Gobierno a seguir retirando los depósitos de la antigua gasolinera de la Avenida de Castilla, el actual portavoz -Emilio Berzosa-, aclara que los tanques ya fueron retirados en 1998, y que fue precisamente Luis Briones el que, ejerciendo como alcalde, se negó el 30 de agosto de 1999 a devolver la fianza a la empresa constructora, al entender que la pavimentación del suelo no era la correcta. «No sabemos si está jugando a la demagogia o es que tiene falta de memoria», subraya Emilio Berzosa, quien le anima a trabajar por Aranda.

Lo cierto es que a pesar de la incertidumbre que despertaba en un principio la obra de la plaza de la Virgencilla, los trabajos han sido muy rápidos y aunque en un primer momento la empresa se planteó un plazo de 3 meses, al final solo ha precisado 3 semanas. «Desde luego choca con las declaraciones del PSOE donde comparaban la obra con las del metro de la Sagrada Familia», subraya Berzosa al recordar que la obra era un compromiso del PP que responde a un acuerdo de Pleno de la anterior legislatura. «Afortunadamente ya está, y tal y como nos pedían, haremos una actuación para acondicionar toda la zona», garantiza.

En este sentido, recordar que la decisión de retirar los 4 depósitos de gasolina del subsuelo de La Virgencilla se remonta al último Pleno de 2009 cuando el PP - entonces en la oposición-, logró sacar adelante la propuesta con el apoyo de Tierra Comunera e Izquierda Unida.