Aranda de Duero
Toros Ricor echa la culpa al Ayuntamiento por poner trabas a la feria taurina
El empresario asegura que “todavía hay tiempo” para organizar los festejos de septiembre
Todo indica que este año tampoco habrá toros en las fiestas patronales.-L.V.
En el día en que expira el plazo para presentar los carteles de la feria taurina de septiembre, nadie sabe si habrá toros, pero todo apunta a que tampoco habrá feria este año. El Ayuntamiento afirma que el empresario no ha presentado los carteles, un requisito indispensable. Por su parte, la empresa Toros Ricor achaca la responsabilidad a la entidad local.
En un escrito que ha remitido al Consistorio y que ha facilitado a las peñas de la ciudad, la empresa asegura que la culpa es del Ayuntamiento de Aranda, ya que desde que el 19 de mayo de 2023 los técnicos municipales realizaron durante una hora una primera inspección, no han vuelto a tener noticias, “pese a haber solicitado información en numerosas ocasiones”. “Después de más de un año, la entidad local no ha dado cumplimiento de la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León”, denuncia a sabiendas de que el auto judicial exige la ejecución de una inspección técnica, previa a la licencia.
En su opinión, “con el retraso de la emisión del informe de la inspección”, el Ayuntamiento “está impidiendo la legalización de la plaza de Toros y en consecuencia la celebración de los espectáculos taurinos de 2023, de la cual, advierte, “es la única responsable”.
En el escrito, el empresario insiste en que la pelota está en el tejado del Ayuntamiento. “Solicitamos nuevamente el cumplimiento de la sentencia dictada por el Tribunal Superior de Justicia y que el Ayuntamiento proceda a remover los obstáculos que impiden la legalización de la plaza de toros de Aranda de Duero y a día de hoy la celebración de los espectáculos taurinos de las fiestas patronales”.
En la reunión que ha mantenido con las peñas, la empresa Toros Ricor asegura que pese a haber expirado el plazo para presentar los carteles, si el Ayuntamiento reacciona y “desbloquea” el proceso, “todavía hay tiempo” para organizar la feria taurina.
Desde el nuevo equipo de gobierno de Antonio Linaje señalan que están estudiando con los servicios jurídicos toda la documentación del expediente de la plaza de toros y dejan claro que apuestan por el diálogo.
La última sentencia dictada por el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León, en mayo, no podía ser más explícita: o la plaza de toros de Aranda de Duero se ajusta a la licencia de obras dada o habrá que derribar la parte ilegal. El juez daba así la razón a la Plataforma Ciudadana por la Plaza y despejaba cualquier duda: el Ayuntamiento de Aranda no puede dejar fuera de ordenación la plaza de Toros, como aprobó en el año 2022, al igual que tampoco puede mantener la licencia de apertura o de actividad, hasta que las obras se amolden a la licencia otorgada.
El auto tumbaba de esta forma los acuerdos adoptados por la Junta de Gobierno Local de los días 9 de agosto de 2022 y 2 de septiembre de 2022, cuando el Ayuntamiento tras conocer la sentencia que anulaba la licencia de apertura y actividad, acordó retrotraer las actuaciones al momento de la inspección de la plaza y declaró además la plaza de toros fuera de ordenación y el mantenimiento de la licencia de apertura y actividad, que había anulado el propio Tribunal Superior de Justicia. A este respecto, el TSJ imponía la necesidad de hacer la ansiada inspección y anulaba el resto de acuerdos. El juez recriminaba además al Ayuntamiento su actitud al “retardar o impedir que se ejecute la sentencia dictada por esta Sala el 25 de marzo de 2022”.
Según el tribunal, el Ayuntamiento, antes de otorgar el permiso de primera ocupación, debe exigir que las obras ejecutadas en el edificio se ajusten a la licencia. Hasta entonces, advertía, debe “realizar todas las actuaciones precisas para que no se ejerza actividad alguna”. “En ningún caso se puede conceder licencia de apertura sin haber obtenido previamente la licencia de primera ocupación”, reseñaba sorprendido con el hecho de que la plaza de toros se haya venido utilizando “de una forma totalmente irregular, mediante autorizaciones provisionales”. “Implica una actuación totalmente contraria a la legalidad por parte del Ayuntamiento”.