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La Policía de Aranda sorprende a dos grafiteros reincidentes. Se les atribuyen más de 90 pintadas

Los individuos, mayores de edad, actuaban con la ayuda de cómplices para evitar ser pillados

Grafiti realizado en la plaza Obispo AcostaPolicía Local

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Aranda

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La Policía Local de Aranda de Duero ha detenido a dos grafiteros a los que se les atribuye un total de 90 pintadas en la ciudad. La primera detención se produjo el domingo, 31 de marzo a las 5.45 horas, cuando los agentes observaron cómo una persona estaba realizando un grafiti en un muro de la calle Comadres, en pleno casco histórico de Aranda. Al ser sorprendido, el individuo emprendió la huida mientras trataba de deshacerse de un bote de pintura en spray, pero fue interceptado.

Según detalla la comisaría, se trata de un varón de 26 años, residente en este municipio. Al comprobar la pintada, que ocupaba una superficie de 3 metros cuadrados con las siglas KOLSY, se enfrenta a una sanción que puede superar los 750 euros.

Además la policía podría atribuirle otras 68 firmas con idénticas siglas, que se distribuyen por toda la localidad y que han sido realizadas con distintos materiales como rotulador o pintura en spray, y en diferentes superficies como puertas, muros, piedras ornamentales de edificios particulares, contenedores de residuos o señales de tráfico.

Pintada en Puerta NuevaPolicía Local

No ha sido el único. En la madrugada del 1 de abril, a las 00.35 horas un vecino alertaba sobre la actitud sospechosa de un grupo de jóvenes. En unión con la Guardia Civil, la Policía identificó a una persona que estaba realizando un grafiti en una señal de tráfico informativa, ubicada en la carretera N-122, en la que se leía el pseudónimo VATO. El autor es un hombre de 20 años de edad, vecino de Aranda de Duero y en cuyas pertenencias se encontraban una escalera telescópica y 7 botes de pintura en espray. Este individuo asumió la autoría de otras 20 pintadas realizadas en Aranda, por lo que se enfrenta a una sanción de hasta los 3.000 euros.

Además, el pasado 2 de marzo una patrulla de Policía Local sorprendía a otro grafitero vecino de Madrid, rotulando el pseudónimo SECK en el edificio del Teatro-Cine Aranda, construido en los años 30 del siglo pasado. Se le intervinieron 9 botes de pintura, 4 rotuladores, dos bolsas con difusores un bote de pintura rellenable y una caja de guantes de nitrilo.

En estos tres casos, estos individuos actuaban con la ayuda de otras personas que realizan vigilancia estática a varios metros de distancia, para impedir ser pillados.

Menores de edad

Por otro lado, el 15 de marzo la Policía sorprendía a una menor de edad que había pintado en la pasarela sobre el río Duero del parque El Barriles. Igualmente fue propuesta para sanción de 750 euros.

Además, el 30 de marzo y gracias a la colaboración ciudadana que no dudó en dar el aviso, se impidió que un grupo de menores de edad realizaran pintadas en la Avenida Teresa de Jesús Jornet, interviniéndoles el material.

Según la Ordenanza Reguladora para la Limpieza Viaria y Ornato Público, “Queda prohibido realizar inscripciones o pintadas en paredes, muros, columnas, quioscos, cabinas, fachadas, farolas, verjas, papeleras, contenedores, mobiliario urbano, etc.”

Las infracciones leves tienen una sanción económica de 750 euros por pintada, aumentando 100 euros más por cada pintada adicional, hasta un máximo de 1.500 euros. En los casos de infracciones graves la sanción podría llegar a los 3.000 euros y si la pintada afecta a un monumento o bien de interés cultural, se trataría de un delito de daños en bienes del patrimonio histórico regulado por el Código Penal.

En el año 2023 se identificaron a 15 personas realizando grafitis, 11 de ellas menores de edad. En 2022 fueron 10 las personas multadas. La Policía Local hace un llamamiento a los vecinos para que alerten a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad o al 112 cuando observen que se están produciendo este tipo de actos.