Carmen, la nueva gerente del único bar de Fuentenebro. “Llego con ganas de quedarme”

Tras dos años de larga espera, Fuentenebro cuenta los días para que reabra el único bar del pueblo. La buena noticia llega de manos de Carmen, una hostelera muy conocida en Terradillos de Esgueva, donde dejó un grato recuerdo. “¿Quién me lo iba a decir, de Ecuador a la Ribera del Duero? Estoy feliz y con ganas de hacer bien las cosas”.

Con 49 años, Carmen Zura es el vivo ejemplo de la superación. Nació en Ecuador, donde trabajaba como auxiliar de enfermería, pero como el sueldo era inferior a las necesidades de su familia, decidió arriesgarlo todo y coger un avión rumbo a España. Al llegar a Madrid, lo hizo sola ya que sus tres hijos pequeños, que entonces tenían 2, 3 y 8 años, se quedaron con su marido. Tocaba iniciar una nueva vida por su familia. “Fue una época muy difícil para todos pero afortunadamente pudieron venir enseguida”, recuerda.

Después de varios intentos, en la capital encontró trabajo en un gimnasio y se asentó con su familia en Pozuelo. Todo iba bien, hasta que llegó la pandemia y un cierre inesperado que le obligó a reinventarse. “En un momento me quedé de nuevo sin nada. Estaba desesperada hasta que mi hermana, que vivía en Aranda, me llamó por teléfono diciéndome que en un pequeño pueblo de la Ribera buscaban a alguien para llevar el bar. Fue como una señal”.

Ella nunca había oído hablar de Terradillos de Esgueva pero cuando llegó se enamoró del bar y de la acogida de la entonces alcaldesa, Monste Monje. “Me lancé sin pensarlo, dejé a mis hijos en Madrid con mi marido porque ya son mayores y tienen su vida, aunque nos vemos siempre que libro; la verdad es que fue una época muy bonita porque la gente me trató fenomenal”.

Como todo en la vida siempre tiene un final y en su caso llegó con un cambio de contrato impuesto por el nuevo Ayuntamiento. “Decidí coger un bar del polígono de Aranda y desde entonces estoy ahí en el antiguo Saeta que ahora llamo ‘Donde Carmen’. El bar funciona muy bien pero solo por las mañanas así que ahora he decidido compaginarlo con el bar de Fuentenebro”.

Las condiciones no tienen nada que ver; en el bar de Aranda al ser alquilado paga 1.000 euros al mes. En Fuentenebro pagará 20. “Me han dicho que en este pueblo hay muy buena gente y yo desde luego pondré todo de mi parte para atenderlos en condiciones. Llego con ganas de quedarme”.

En Fuentenebro el bar abrirá todos los días a las 14:00 horas y cerrará cuando no haya gente, mientras que en Doña Carmen abre solo de lunes a viernes y en horario de mañana para desayunos y almuerzos.

Según fija el contrato que ya ha firmado, estará en el bar de Fuentenebro hasta que el Ayuntamiento rehabilite y acondicione, en uno o dos años, el nuevo bar en la antigua Casa del Cura. “Es muy emocionante porque va a quedar fenomenal”.

Preparados para la II Feria de la Uva

Junto al nuevo bar de Carmen, Fuentenebro reserva además otra novedad para el mes de julio: la Feria de la Uva 2024, que este año celebra su segunda edición el día 13. El programa es abierto y amplio y destaca por las degustaciones de vinos, aperitivos y música tradicional. Los que lo deseen pueden quedarse a comer y participar en catas de uvas y de vinos. También habrá juegos para niños y música en directo por la tarde y por la noche.