La crisis del PP Aranda sigue en punto muerto: ni expulsión ni salida

Once días después de que el PP de Aranda anunciara la expulsión del grupo municipal de la concejala y presidenta de la Arandina, Virginia Martínez, sorprendentemente todo sigue igual. Al no haber oficializado el cambio, Virginia sigue ejerciendo como concejala de un grupo municipal con el que apenas hay trato. Así se vio esta tarde en la celebración del pleno.

Desde el PP aseguran que la decisión está tomada, pero están dando tiempo para que sea una salida tranquila. En cualquier caso el ultimátum es claro y si Virginia se niega a abandonar el grupo municipal, como todo parece indicar, y no devuelve el acta, lo que implicaría pasar al grupo de los concejales ‘no adscritos’, la expulsión se extendería al propio Partido Popular. “La decisión es firme”, zanja la portavoz del PP en Aranda, Cristina Valderas.

Lo cierto es que la situación es cada vez más difícil para la abogada, Virginia Martínez. La crisis interna que llevaba meses viviendo el club deportivo saltó a la luz pública el pasado 16 de octubre cuando un grupo de 35 personas, entre ex jugadores, entrenadores y madres y padres dieron el paso de crear una alternativa bajo el nombre Unión Arandina. Como primer paso presentaron una demanda judicial contra la presidenta y su junta directiva por posibles delitos de “administración desleal, apropiación indebida, estafa, amenazas, coacciones e injurias”.

El panorama se complicó todavía más el 21 de octubre, fecha en la que la directiva convocó una asamblea para votar dos temas importantes: las cuentas y el paso a una Sociedad Anónima Deportiva (SAD). Ante la negativa de la directiva de permitir el acceso de personas que son socias, pero contrarias a su gestión, la calle se llenó de gritos y pancartas en contra tanto de la presidenta, Virginia Martínez, como de su pareja, y secretario, Francisco Galán.

La tensión del ambiente y la “falta de transparencia y democracia” no gustó en el seno de un Partido Popular, que en un escueto comunicado, anunció el 24 de octubre la expulsión de Virginia Martínez, del grupo municipal del PP. “Mañana entregaremos la reestructuración del grupo municipal”, advertía la portavoz, Cristina Valderas.

Sin embargo, el documento no se ha registrado y la situación sigue complicándose. El pasado martes, el Ayuntamiento de Aranda anunció la suspensión, por ahora temporal, del pago de los 190.000 euros del convenio de patrocinio de la Arandina, que había firmado el Consistorio en enero para ayudar a la celebración del partido de Copa del Rey contra el Real Madrid, por presuntas irregularidades en el proceso.

Al parecer se ha podido incurrir en un presunto delito de falsedad documental, ya que aunque en mayo de 2023 la Arandina presentó un documento con la renuncia de Virginia Martínez y Francisco Galán como presidenta y secretario, y la sustitución por otras dos personas, esa información no figura en el certificado de composición de la junta directiva que consta en el Registro de la Junta de Castilla y León, donde, desde el 10 de agosto de 2021, la única junta directiva “inscrita y reconocida” es aquella en la que Virginia Martínez Casaos ostenta la presidencia y Francisco Galán Perdiguero la secretaría. Intervención duda así de la legitimación como representante de Patricia del Cura, quien fue la que firmó el contrato. Fuentes cercanas al PP admiten que esta nueva crisis solo ratifica el sentido de la expulsión del grupo municipal.