Hallan el cadáver de un arandino de 50 años que llevaba 6 meses muerto en su casa
Apareció en su domicilio de la calle Greco de Aranda de Duero. La Guardia Civil encuentra a un vecino de 90 años, también fallecido en su vivienda de Castrillo de la Vega
Agentes de la comisaria de la Policía Nacional de la localidad burgalesa de Aranda de Duero descubrieron el cadáver de un vecino de la villa, que al parecer llevaba cerca de seis meses fallecido en su casa, en el barrio de la Estación, concretamente en la plaza del Greco. El hombre tenía 50 años según confirman fuentes policiales y aún se desconocen las causas de su muerte, aunque se sabe que su cadáver no presentaba signos de violencia.
Según ha confirmado este periódico, el aviso a las autoridades lo dio este miércoles al filo de las siete y cuarto de la tarde un familiar del hombre fallecido que fue quien llamó por teléfono al servicio de emergencias 112 preocupado porque llevaba mucho tiempo sin saber nada de él. Este hombre residía solo en la vivienda de la plaza Greco tras el fallecimiento de sus padres y dejó de ser visto hace meses, según explicaron los vecinos a las fuerzas del orden.
Hasta el domicilio del fallecido en la plaza del Greco se desplazaron agentes de la Policía Nacional, la Policía Local y los bomberos de Aranda, que tuvieron que forzar la entrada para acceder al inmueble, donde localizaron el cuerpo sin vida del hombre fallecido que presentaba un estado de momificación parcial.
Tras la autorización judicial se produjo el levantamiento del cadaver y será la autopsia la que determinará tanto la fecha de la muerte como el motivo, pero dada la declaración del familiar que lo echó en falta y el estado del cuerpo, se aventura que el fallecimiento pudo producirse hace unos seis meses.
Un fallecido en Castrillo de la Vega
Cabe lamentar una segunda muerte en domicilio de un hombre en la Ribera del Duero, que fue detectada el mismo día. Este miércoles agentes de la Guardia Civil descubrieron en la localidad ribereña de Castrillo de la Vega el cadaver de un varón de 90 años que también yacía muerto en su casa. La alarma ante las autoridades la dio en este caso un sobrino que llevaba una semana sin lograr hablar con él.