La escultura de la diosa Fortuna de Clunia, restaurada por el CCRBC
La pieza es una escultura de mármol romana de tamaño superior al natural hallada a lo largo de varias campañas de excavación arqueológica, que presenta rasgos iconográficos, que han permitido asimilarla con una personificación de la divinidad Fortuna
La Consejería de Cultura y Turismo, a través del Centro de Conservación y Restauración de Bienes Culturales de Castilla y León, CCRBC, ha restaurado la escultura de la diosa Fortuna del teatro romano Clunia, Burgos, en el marco del Plan de Intervención PAHIS 2020.La restauración de la escultura de la diosa Fortuna se inició con un proyecto de estudio e investigación sobre la pieza procedente de un contexto arqueológico privilegiado como es el teatro romano de la Colonia Clunia Sulpicia en Peñalba de Castro, en Burgos, en el que la Consejería de Cultura y Turismo colabora, junto con la Diputación de Burgos, en su recuperación y puesta en valor.Esta actuación sobre la pieza se realiza en el marco del Plan de Intervención PAHIS 2020, que cuenta con un programa específico que da soporte a las acciones que se desarrollan desde el Centro de Conservación y Restauración de Bienes Culturales de Castilla y León. Uno de los objetivos del CCRBC es la investigación aplicada a la conservación, dentro del ámbito de la especialización técnica e instrumental con la que está dotado.La pieza es una escultura de mármol romana de tamaño superior al natural hallada a lo largo de varias campañas de excavación arqueológica, que presenta rasgos iconográficos, que han permitido asimilarla con una personificación de la divinidad Fortuna. Aparece vestida a la manera griega con túnica ceñida bajo el pecho y cubierta parcialmente por un manto. Su principal peculiaridad, desde el punto de vista formal y morfológico, es que se encontró multifragmentada en casi de 200 elementos que permitían evidenciar la gran calidad escultórica de la obra.El proyecto de investigación y restauración se ha abordado de forma multidisciplinar, realizando un completo estudio de caracterización del material escultórico y su procedencia, así como también de la composición y estructura de los distintos fragmentos. Por otro lado, al reconocerse evidencias de policromía en algunas zonas de la superficie, se abordó un estudio sobre los pigmentos y cromatismo de la escultura a través de técnicas que no requerían la toma de muestras, como la fluorescencia de rayos X y también análisis químicos a través de microscopía óptica y electrónica, que han permitido llevar a cabo una recreación del color de la misma.Para la realización de estas investigaciones, además de con el Laboratorio de Física y Química del CCRBC de Castilla y León, se ha contado con la colaboración de otras instituciones, como la Universidad de Zaragoza, o el Instituto de Patrimonio Cultural de España.Detalles de la intervenciónLa volumetría y el estado de conservación de los los fragmentos fueron objeto de documentación por medio de escaneado láser 3D, a fin de generar un modelo virtual, pero también una impresión en 3D de cada uno de ellos, para proceder a una aproximación al montaje y reconstrucción del volumen de la pieza, aspecto que revestía una gran dificultad, si tenemos en cuenta el tamaño y el peso de la mayoría de ellos, que hacían muy compleja su manipulación.El proceso de restauración y montaje de la escultura ha hecho preciso recurrir a procedimientos no habituales dentro del ámbito de la intervención en este tipo de obras, planificando una metodología específica. En primer lugar, se realizó una consolidación estructural de todos los fragmentos mediante tratamiento químico. Después, se procedió a la limpieza de cada uno de ellos, combinando procedimientos mecánicos y limpieza fotónica a través de láser.Para el montaje se ha diseñado y construido una estructura interna y autoportante, que permite, mediante ligeros rebajes, ubicar cada uno de los fragmentos y anclarlos entre sí sin utilizar adhesivos. En las zonas donde era preciso se ha realizado una reconstrucción volumétrica con materiales ligeros y reversibles, y cuando ha sido necesario se ha aplicado una entonación cromática.La intervención se completa con la instalación de la escultura en el centro de interpretación de Clunia, con la colaboración de la Diputación de Burgos y el equipo de investigación del yacimiento -Escuela Técnica Superior de Arquitectura de la Universidad de Valladolid y Universidad de Barcelona- en la que se está trabajando en la actualidad.Para contribuir a su interpretación, se han realizado una serie de materiales didácticos de apoyo como paneles explicativos, panel con recreación del cromatismo de la escultura y video en el que los técnicos participantes explican el proceso de estudio y restauración de la pieza.