Sindicatos y patronal reclaman un modelo industrial con empresas más grandes

Para que Castilla y León recupere la competitividad perdida en los últimos años e, incluso, adquiera más de la conseguida antes de la crisis y pueda competir de tú a tú con cualquiera en un mercado globalizado, debe cambiar el modelo productivo y dirigirlo hacia la industria. En esto coinciden patronal y sindicatos. Cecale, UGTy CCOO ven dos claves para superar los actuales índices de productividad: que Administración y compañías apuesten por la innovación con inversiones significativas y que las empresas ganen tamaño.El presidente de la patronal autonómica Cecale, Santiago Aparicio, el secretario general de UGT Castilla y León, Agustín Prieto, y su homólogo en CCOO, Ángel Hernández participaron ayer en la mesa redonda moderada por Pablo R. Lago, director general editorial de EL MUNDO DECASTILLAYLEÓN, dentro del Foro Competitividad y modelo productivo, organizado en León por el Club de Prensa de ELMUNDODECASTILLAYLEÓNy el Consejo Económico y Social (CES).

Ninguno de los representantes de los agentes sociales considera que el modelo productivo que reclaman deba olvidarse de sectores como la construcción o el turismo, que han ‘tirado’ de la economía, ni de la industria manufacturera, la medioambiental o agroalimentaria. Pero sí abogan por dar un giro hacia una industria más puntera, con empresas que atiendan a la investigación, la innovación y el desarrollo. «De nueva tecnología, del sector logístico...», apuntó Aparicio. «Hay que modernizar el entramado industrial, sin desatender el resto», indicó Prieto. «Los países más industrializados han pasado mejor la crisis», señaló el presidente de los empresarios, que lamentó que la escasa inversión de los gobiernos nacional y autonómico en I+D «merma mucho la capacidad productiva».El secretario de UGTapostilló que «la Administración se cree poco esto de la I+D porque la partida de la Junta a esta materia decrece un 2%» en los presupuestos de 2016.Sindicatos y Cecale coinciden en que uno de los mayores handicap de Castilla y León es que ni siquiera cuenta con un nutrido grupo de pymes, sino que la mayoría de sus empresas tienen 10 o menos trabajadores. Ángel Hernández aseguró que la Comunidad «necesita empresas de 50 y 100 trabajadores, más que de 50 para abajo». El secretario de CCOO llama a la importancia de «aumentar la cooperación del tejido empresarial», con lo que matizó que no se refiere a «fundir las empresas» sino a ganar tamaño para, por ejemplo, «ser más fuertes para pelearse con el capital financiero», que considera «uno de los principales problemas». Tanta importancia le dio a que las compañías deben crecer, que fuera de eso dio pocas opciones: «Y si no pueden ser más grandes, a sobrevivir».El presidente de los empresarios advirtió ayer de que las empresas «que no quieran unirse y ser absorbidas tendrán que especializarse mucho e internacionalizarse porque su mercado no va a estar aquí».Aparicio ve la internacionalización como algo imprescindible en el escenario actual. «La empresa que no haga innovación o no se internacionalice tiene un futuro difícil. Hoy la internacionalización es la clave».Otro de los aspectos que patronal y sindicatos criticaron fue la falta de planificación. Aparicio lamenta que ni siquiera se haya «planificado una fuente de riqueza como el turismo» y Prieto denuncia que «falta una política industrial de alto calado de laJunta». Pero indicó que, «a través del diálogo social, se están cambiando las bases, aunque sea lentamente con el acuerdo marco». Reclamó una normativa de industria que dinamice y genere competitividad.

Por otro lado, Prieto incidió en que «el coste salarial no influye en la productividad, mientras sí lo hacen otras cuestiones como el coste energético para una empresa».Todos clamaron contra una burocracia que complica la creación y la supervivencia de las empresas. «No debería tardarse más de 3 o 4 meses en obtener las licencias oportunas para reformar una empresas, las administraciones deben agilizarlo», incidió Hernández.