El PSOE pide el cese del consejero tras la polémica sobre la radioterapia

El Pleno de ayer comenzó bronco y en la segunda pregunta del día los socialistas reclamaron la cabeza de un miembro del Gobierno. La procuradora Ana Sánchez responsabilizó al consejero de Sanidad, Antonio María Sáez Aguado, de la alarma generada entre los usuarios de la sanidad por las declaraciones del delegado de la Junta en Segovia, que criticó que Zamora cuente con una unidad de radioterapia.Los socialistas habían denunciado en su primera pregunta los datos económicos de la comunidad autónoma, las malas perspectivas en la confianza de los empresarios y los consumidores sobre todo. La titular de Economía, Pilar del Olmo, les acusó de ser «unos negativos y unos grises» y les llamó «imprudentes» por crear un mal ambiente que puede ahuyentar a las empresas que quieran invertir.Quizá eso encendió a la socialista Sánchez cuando le tocó intervenir a renglón seguido y enlazó preguntando al consejero Sáez Aguado si le parecían prudentes las declaraciones del delegado de Segovia. El titular de Sanidad respondió que no, y que por eso Javier López-Escobar tuvo que desdecirse y pedir disculpas.Eso no calmó a la diputada, a la que las disculpas no sirven y quien acusó de «poca prudencia» a la vicepresidenta, Rosa Valdeón, por esconderse y no cesar al consejero de Sanidad.Porque para ella la alarma generada sobre «un sector modélico» como la radioterapia de Zamora, además de otros fallos anteriores, entre los que citó la pérdida de 15.000 pruebas radiológicas en Ávila, hacen que las disculpas no sean suficientes. Así que pidió a la vicepresidenta, originaria deZamora, que escuche «el clamor» contra la continuidad del consejero.

Este, por su parte, acusó a la procuradora de ser dogmática, lo contrario que el Gobierno, que por eso duda y consulta a los pacientes y a los profesionales para poder prestar el mejor servicio.