El singular Rodafonio inaugura el Fàcyl de calle ante la mirada de decenas de salmantinos
Junto a la Tremenda Brass Band, realizaron dos pasacalles por las arterias del centro histórico de Salamanca hasta llegar, aunque separados, a la plaza Mayor
El singular espectáculo Rodafonio, consistente en una rueda gigante en la que, sentados pero girando por la estructura, tocan un batería, un guitarrista y un saxofonista conducidos por dos particulares ciclistas, inauguró junto a la Tremenda Brass Band el Festival de las Artes de Castilla y León en las calles de Salamanca. Poco después de las 19.30 horas, ambas agrupaciones, una desde la plaza de Anaya y otra desde la calle Zamora, emprendieron su musical camino hacia la plaza Mayor, deteniéndose en varias de las plazas que encontraban a su paso y amenizando la tarde a decenas de salmantinos que, móvil en mano y especialmente ante el espectáculo del Rodafonio, se detenían para fotografiar, grabar, aplaudir e incluso bailar la música producida por las agrupaciones.
A las 20.00 horas, entró en el ágora charra la Tremenda Brass Band, conjunto formado por dos trompetas, dos trombones, un bombardino, un saxofón y dos instrumentos de percusión, para confluir con una Fàcyl Crew procedente de la rúa Mayor. 25 minutos después, y cuando la Tremenda Brass Band ya había iniciado su camino de vuelta, apareció en la plaza Mayor el Rodafonio, que hizo de telonero de excepción al concierto que durante la noche desarrollará en el centro neurálgico de Salamanca el DJ Ed is Dead como broche de la primera jornada de Fàcyl 2016.