Los padres de los niños apeados por Renfe en Palencia se organizan para denunciar a la compañía
La madre de uno de los escolares denuncia que esta intervención supuso "un calvario de 13 horas" para los menores
Estación de Palencia, en la que se apeaba a los menores. E. M.
Padres de los escolares de 11 y 12 años expulsados de un tren de Renfe en Palencia denunciarán a la compañía ferroviaria. Algunos ya han manifestado su descontento en redes sociales porque el interventor decidiera obligar a bajarse en el trayecto Barcelona Sants-León a la veintena de menores y dos monitores "por mal comportamiento" tras las quejas de otros viajeros.
A través de Twitter, una madre, bajo el nombre de perfil @astridalemany, ha relatado que los alumnos de la Escuela de Vilademàger de La Llacuna se dirigían a unas colonias en León. "Estaban tan emocionados que no se lo creían", afirma Astrid Alemany en un hilo donde explica su visión de los hechos. Y ha anunciado acciones conjuntas. "Los padres y madres nos estamos organizando para hacer la denuncia pertinente a Renfe".
Esta madre no comparte los motivos de dicha expulsión: "Después de 8h de viaje, el interventor decidió que 'llevaban la mascarilla mal puesta y estaban haciendo mucho ruido' y dejó tirados a los chavales en la estación". Sin embargo, desde RENFE aclaran que los menores "nunca estuvieron solos ya que, además de sus tutores, estuvieron acompañados por la Policía Nacional, el subdelegado del Gobierno de Palencia y personal de la compañía".
Ahir @RENFE va expulsar del tren a la meva filla i als seus 21 companys de 10 i 11 anys a l’estació de Palència. Després de 8h de viatge, l’interventor va decidir que “llevaban la mascarilla mal puesta y estaban haciendo mucho ruido” i va deixar tirats als nanos a l’estació
— Àstrid Alemany (@astridalemany)
Astrid Alemany se pregunta si este hecho, histórico por otra parte al ser la primera vez que Renfe apea a unos viajeros por esta cuestión, hubiera podido tener peores consecuencias. "¿Qué hubiera pasado si en esas 2 horas abandonados le llega a pasar algo a nuestro hijo o hija?", apunta. "El incidente de ayer es muy grave. Es grave que un interventor decida expulsar y dejar desprotegidos a menores de 10 y 11 años sin dar solución alguna", publica en la red, quien califica lo vivido por estos niños como "un calvario de 13 horas en total desde que por la mañana salieron de la estación de Sants".
En contraste con esta situación, desde la Asociación de Usuarios de Alta Velocidad de Castilla y León señalan que en muchas ocasiones han denunciado que los pasajeros no usaban la mascarilla y la respuesta de los interventores fue que no era su competencia. "Durante los dos últimos años ningún interventor ha decidido hacer nada respecto a la mascarilla ¿Por qué ninguno ha hecho nada hasta ahora?", señala Carlos Perfecto, presidente de la asociación.
"El interventor se ha tenido que ver en una situación complicada para tomar esta medida", apunta Perfecto. Asimismo, entiende la expulsión de los escolares como una decisión demasiado fuerte puesto que los afectados son niños, pero valora la situación desde el punto de vista del resto de usuarios del tren, que se quejaban del mal comportamiento de los menores desde la salida de Barcelona. "Los niños son niños, juegan, gritan y se quitan la mascarilla; pero había adultos responsables, los tutores, que podrían haberlos corregido", concluye el presidente de la Asociación de Usuarios de Alta Velocidad de Castilla y León.