Feijóo mantiene su oferta de que gobierne el más votado pese a que perdería Valladolid y Burgos
El presidente del Partido Popular desea que "no se interrumpa el cambio" en España tras las municipales
El presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, aseguró que sigue manteniendo que gobierne la lista más votada, aunque eso supusiera perder el gobierno en ciudades como Valladolid y Burgos. Además, tampoco gobernaría en Extremadrura. “Ganaríamos cantidad de capitales de provincia, cantidad de diputaciones. El problema es que el PSOE ya nos ha contestado diciendo que nunca dejará gobernar a la derecha española”, agregó en una entrevista en Telecinco. A pesar de ganar en algunas provincias, el PP también perdería en Valladolid y Burgos ya que necesita un pacto con Vox para alcanzar la Alcaldía. En caso de que no llegue a un acuerdo con la formación de Abascal gobernaría la lista más votada, en Burgos el PSOE de Daniel de la Rosa y en Valladolid el PSOE de Óscar Puente.
“O sea, ¿reeditamos el Pacto del Tinell y lo elevamos a la máxima potencia?”, reprobó. “¿El PSOE no puede dejar gobernar nunca al PP aunque el PP esté dispuesto a dejarle gobernar cuando gana?”, repreguntó. “Comprenderá usted que si no quiere ni siquiera sentarse a hablar conmigo, yo quedo legitimado para hablar con los demás”, avisó a renglón seguido.
El líder de la oposición defendió de esta manera que le gustaría un pacto para que gobernase el más votado siempre y cuando fuese aceptado también por la otra parte, al tiempo que subrayó que el PP “por supuesto” que puede “hablar con partidos constitucionalistas”, informa Ical.
Ante el compromiso adquirido por Ciudadanos de no concurrir ya a las elecciones generales, volvió a agradecer públicamente que se haya tomado esta “buena decisión”. Sobre el diálogo con Vox, Feijóo recalcó que no tiene “ningún inconveniente en hablar con todo el mundo”. “La relación con el presidente de Vox es de una absoluta cordialidad”, concretó.
“Lo que ocurre”, continuó Feijóo, es que el PP tiene un proyecto político “distinto” al de Vox. “Y yo creo que en este momento el presidente del Gobierno que salga de las urnas tiene que tener un mandato muy claro y muy determinante. Sería bueno para nuestro país. Si no, iremos más lentos y tendremos más dificultades”, argumentó.
Así las cosas, subrayó que su “modelo” es el de las mayorías absolutas y no piensa “renunciar” antes de las elecciones generales a ello. Para “lo otro ya tenemos a Pedro Sánchez, que está dispuesto a gobernar con Podemos uno, Podemos dos y con los 15 o 18 partidos que conforman el conglomerado” en un “Frankenstein elevado a la máxima potencia”, deploró.
Cambio
Alberto Núñez Feijóo compartió su esperanza de que “no se interrumpa el cambio” tras las elecciones del 28 de mayo, recalcando que “sería el mundo al revés” que Vox “le dé sus votos a la izquierda” cuando “está en disposición” de “facilitar” la “derogación del sanchismo”. Además, se pronunció en estos términos cuando fue preguntado por posibles pactos a futuro con Vox para gobernar tras el 23 de julio y por acuerdos con este partido tras los resultados del 28-M en aquellos territorios donde hace falta la suma entre ambos.
En clave nacional, Feijóo defendió que España debe tener “un Gobierno muy fuerte y un presidente que no dependa más que de las urnas, del voto directo de la gente” y que con ese mandato pueda hacer las reformas comprometidas. Pidió así un “voto de confianza” con la vista puesta en los comicios generales del 23-J.
Feijóo se remitió a sus mayorías absolutas en Galicia y subrayó que siguen existiendo y prueba de ello es Andalucía, Madrid o La Rioja. En otros enclaves como la Comunidad Valenciana, Aragón o Baleares recordó la victoria del PP y remarcó que en este último caso, así como en la Región de Murcia, el PP suma más votos que toda la izquierda junta.
“Espero que nadie interrumpa este cambio”, afirmó Feijóo, explicitando que su objetivo no es otro que “gobernar en solitario” y “conseguir una mayoría suficiente” para tal fin. “Yo supongo que si esa fuerza”, en alusión a Vox, “quiere derogar el sanchismo, está en disposición de facilitarlo”, añadió el líder de la oposición.
En todo caso, “si lo que pretende” Vox “es tener una cuota de poder o tener ministerios o tener consejerías eso es otra cosa”. “Pero que lo digan claramente”, recomendó a los dirigentes del partido de Santiago Abascal. “Si quieren derogar el sanchismo, yo lo propongo y lo he propuesto desde hace meses”, insistió.
De tal manera, reafirmó que él espera que “no se interrumpa el cambio”. “Si en Valencia ha ganado claramente el PP, si en Baleares ha ganado claramente el PP, si en Aragón ha ganado claramente el PP, que nadie interrumpa lo que sale de las urnas”, demandó. Si “este partido”, por Vox, le diese sus votos a la izquierda “sería el mundo al revés”, apostilló.