La Junta propone cargarse el puente de diciembre para mantener el festivo del 25 de julio
La Consejería de Empleo traslada el festivo del 8 de diciembre, que cae en domingo, al Día de Santiago, eliminando un puente natural de cuatro días
Nueva polémica absurda a la vista que emana directamente de la Consejería de Empleo que dirige Mariano Veganzones (VOX). La Junta propone ahora cargarse el puente de diciembre en 2024 para mantener como festivo el 25 de julio, que este año suplió a la festividad de Castilla y León, el Día de Villalar, que cayó en domingo, y en vez de pasarlo al lunes, como era tradición se cambió por el Día de Santiago.
El próximo año el 8 de diciembre, festividad de la Inmaculada cae en domingo. El 6, Día de la Constitución es viernes. Es decir un puente natural de cuatro días consecutivos que sólo se produce cada seis o siete años. Pues la propuesta que emana de la Dirección General de Trabajo y Prevención de Riesgos Laborales es que el 8 de diciembre de 2024, en vez de pasarse al lunes, como es tradición y dicta el sentido común, se pase al 25 de julio para sostener la alteración de este año de que sea Festivo Santiago Apóstol. El 25 de julio de 2024, en medio de las vacaciones, cae en jueves.
Esto es una propuesta a los agentes sociales que tendrán que dar su opinión. Una única propuesta de la Consejería de Empleo. En otras ocasiones, como recuerdan fuentes de la consejería, se ofrecían tres propuestas, se valoraban y se buscaba la opción más favorable para la gente, para los ciudadanos de Castilla y León, no para alimentar la ideología de nadie.
En cualquier caso, el calendario de festivos laborales de Castilla y León, tiene que ser revisado y aprobado por el Consejo de Gobierno. Esta propuesta que hace VOX no es conocida por la parte fuerte del gobierno, el PP, según han confirmado fuentes del ejecutivo a este periódico.
El año pasado la Consejería intentó cargarse el festivo del 1 de enero para cambiarlo por el 25 de julio. Fracasó y finalmente acordó con el PP que el festivo que sacrificaría sería el 23 de abril, Día de la Comunidad, no sin un enorme revuelo y una gran polémica. A los trabajadores, muchos de los cuales están de vacaciones en julio, les supone la pérdida de un festivo. En concreto, en el caso del sector de la educación, ese festivo en julio les supone la pérdida de un día festivo. La de Educación es una de las plantillas más amplias de la Junta de Castilla y León, junto a la de Sanidad.
El argumento para mantener el festivo del 25 de julio es que Santiago es el patrón de España. Algún sector de la patronal señala que al ser festivo en el resto del país el 9 de diciembre se beneficia el comercio. Asunto que sólo defienden miembros de la patronal cercanos a VOX. Porque es completamente incierto. En otras comunidades, como Madrid, nuestro principal rival en comercio, los festivos son días de apertura para favorecer las compras del turismo. Lo que sí se perjudica notablemente es el turismo rural o de interior. Son fechas en las que la demanda interna, es decir la de los ciudadanos de Castilla y León que aprovechan para visitar otras provincias, está entre las más altas, tal y como reflejan los datos de las propia Consejería de Cultura y Turismo que también gobierna VOX, con Gonzalo Santonja como consejero.
La propuesta de festivos que ha hecho la Consejería de Industria Comercio y Empleo para 2024 es la siguiente:
1 de enero, 6 de enero, 28 de marzo, 29 de marzo, 23 de abril, 1 de mayo, 25 de julio, 15 de agosto, 12 de octubre, 1 de noviembre, 6 de diciembre y 25 de diciembre.
La polémica y la controversia está servida nuevamente. Falta saber si VOX mantendrá el pulso. Y falta saber si el PP aceptará el pulso o lo zanjará con sentido común. El de diciembre es un puente de turismo rural. Pero también es un puente de familias, en el que los ciudadanos aprovechan para regresar a sus lugares de origen y visitar a sus parientes. A veces la política se desconecta de una forma absurda de la realidad cotidiana de los ciudadanos.