UBURAMA
¡Y cómo hemos cambiado...!
El productor Luis Calvo, el músico Diego Galaz y el periodista Julio Ruiz confirman el vuelco de la industria discográfica
A.S.R. / Burgos
Ah, cómo hemos cambiado... El primer verso de aquella famosa canción de Presuntos Implicados se pega sin remedio después de la hora de análisis de la situación del panorama discográfico que ayer tuvo al CAB como escenario y al Festival Uburama como artífice. La pregunta era Cómo grabar un disco y no morir en el intento. Y la contestaron el productor Luis Calvo, el periodista Julio Ruiz y el músico Diego Galaz. Los tres coincidieron a la hora de señalar que el panorama ha pegado un vuelco radical desde los años ochenta a la actualidad, más si el bisturí se remonta a los sesenta, con las nuevas tecnologías como responsables destacados.
Las razones de cada uno de los participantes, debidamente presentados por la coordinadora del programa Crea de Caja de Burgos, Beatriz Rodríguez, fueron escuchadas por más de un centenar de personas que llenaron el nivel -2 del Centro de Arte Caja de Burgos.
La palabra cambio fue la más repetida. A ella se refirió Luis Calvo, fundador y director del sello de música independiente Elefant Records, artífice del Festival de Benicassim y director del programa radiofónico Viaje a los sueños polares, entre otros logros. «Las cosas han cambiado mucho. Hace sesenta años las posibilidades de grabar un disco eran muy pocas y ahora se han multiplicado. El mundo de la música ha cambiado mucho estos años. Ahora mismo la evolución tecnológica está muy presente y brinda unas facilidades enormes en la grabación y en la difusión de los grupos», señalaba en un primer planteamiento, al que después hacía sus matizaciones, que haberlas haylas.
Y aquí entran en juego los grupos. «Es un buen momento, pero también malo». Hay infinidad de ellos. Contaba Calvo que a Elefant llegan entre 5 y 10 maquetas cada día, con lo que incalculables resultan las creaciones que cuelgan en internet y también la cantidad de música de calidad que se puede perder en este maremágnum. «Necesitamos a gente que dirija a los jóvenes como nos pasó a nosotros. Ahora todo es una locura y es más difícil destacar», anota.
Y ese papel es el que desde hace cuatro décadas interpreta Julio Ruiz, al frente del programa Disco Grande de Radio 3, que unas horas antes emitía en directo desde el Aula Magna de la Facultad de Derecho. El periodista suscribía la apreciación de cambio de Calvo. Para Ruiz la dificultad no se encuentra en la grabación propiamente dicha -«basta con un estudio apañadico»-, sino en tener «voceros que lo publiciten y llegue». Certifica, evidentemente, el cambio radical en el mundo discográfico: «Los artistas ya no necesitan un sello ni multi (multinacional) ni indie (independiente). Está la red, la radio y otros medios y puede funcionar el boca a boca».
Y de eso sabe Diego Galaz (La Musgaña, Fetén Fetén, Mastretta...), que se enfundó el traje optimista. «Las cosas han cambiado para bien», sentencia y considera que el tiempo, y también la crisis (difiere Calvo para quien esta es un freno para sellos y artistas) y las nuevas herramientas tecnológicas, ha puesto a todos en su sitio. Dice que los músicos se han olvidado de la ilusión por dar el pelotazo y ser millonarios -«algo más propio de futbolistas y no de músicos, que siempre hemos sido pobres, hemos ido con lo justo y lo puesto»- y que pequeños proyectos ahora tienen su espacio.
No suscribe, sin embargo, que las discográficas y las empresas de manager hayan evolucionado. Cree que se resisten a cambiar, que la mayoría sigue mirando el negocio y no la creación, pero augura: «De aquí a unos años se va a dar un mercado alucinante, donde tendrá cabida la calidad, sea pop, folk o rock».