Cerrar

Orden Carmelita

Al 'rescate' de todos los manuscritos de Santa Teresa

Burgos

Creado:

Actualizado:

La Orden de los Carmelitas Descalzos lanza un llamamiento mundial para localizar los manuscritos perdidos de Santa Teresa de Jesús con el objetivo de completar la catalogación de sus autógrafos, informa Europa Press. El padre Tomás Álvarez, miembro de la comunidad carmelita de Burgos, capitanea esta misión. La meta es reunir la colección más grande posible con motivo de la celebración del quinto centenario del nacimiento de la santa nacida en Ávila en 1515 y que tendrá lugar dentro de tres años.

La petición que la Orden religiosa ha lanzado a nivel internacional está dirigida principalmente a centros religiosos, monasterios, templos, archivos y bibliotecas, pero también a particulares de todo el mundo que puedan ayudar a completar «el mayor mapa de una de las figuras más apasionantes de la religiosidad y la literatura del siglo XVI», según apuntan los Carmelitas.

Concretamente, señala que la recopilación de todos esos textos de los que se tiene un conocimiento sesgado o que están totalmente desaparecidos puede ser «una de las mayores aportaciones» al conocimiento de la figura de la religiosa abulense y al estudio de la literatura del Siglo de Oro.

El padre Tomás Álvarez anota que lograr un catálogo lo más aproximado posible de todas las páginas teresianas cuatro siglos después de su creación será «una buena aportación al patrimonio cultural y, más especialmente, a la cultura espiritual cristiana».

Las 1.300 páginas autógrafas de Santa Teresa de Jesús que se conservan en la actualidad son, según el cálculo de los expertos, apenas la mitad de la producción manuscrita de la mística abulense. Por lo que es importante la cantidad de escritos de la religiosa que se esconden quién sabe dónde.

En este sentido, Álvarez explica que esta dispersión se debe sobre todo a la existencia en el siglo XVII de una forma de «extraña religiosidad popular» que llevó a considerar reliquias de la santa sus manuscritos, motivo por el que muchas de las páginas fueron troceadas y repartidas en relicarios presumiblemente distribuidos por todo el mundo.