EXPOSICIÓN
El ‘best seller’ de la Edad Media
El Museo del Libro ahonda en ‘El Bestiario de Westminster’, la última apuesta editorial de Siloé, que se desgranará hasta mayo
A.S.R. / BurgosGrifos, arpías, cigüeñas, leones, águilas, serpientes, cabras... Un particular zoo puebla el Museo del Libro Fadrique de Basilea. Son animales que se han escapado del Bestiario de Westminster, volumen en el que ahonda la nueva exposición temporal de este espacio y, al mismo tiempo, el nuevo lanzamiento editorial facsimilar de su promotora, Siloé.La abadía londinense de Westminster conserva este códice, fechado entre 1275 y 1290, al que hasta ahora solo podían acceder unos escogidos.Antes de que el paso del tiempo lo convirtiera en joya de exposición, este volumen fue la atracción del momento, como el resto de bestiarios, que proliferan entre los siglos XII y XIII, y principalmente en Francia y Reino Unido.«Eran los best seller de la época. Tuvieron mucho éxito porque se hacían con un carácter divulgativo, ya que las miniaturas salvaban la diferencia para el público analfabeto, mezclaban tema zoológico y moralizante, por lo que los dos componentes unidos hacen que tengan mucha importancia y éxito entre la población en general en la Edad Media», anota el director del Museo del Libro, Rodrigo Burgos, quien adelantó que la programación de primavera del centro se consagrará a ahondar en estos volúmenes llenos de animales reales y también fantásticos que se asoman a las páginas del Bestiario de Westminster en las paredes de la primera planta del espacio del Hondillo hasta el 11 de mayo (entrada libre).De este volumen, con un origen probable en York, dicen que es uno de los más hermosos y ricamente decorados del mundo. Tiene 130 páginas de 225x160 milímetros y contiene 164 miniaturas con dominio del rojo y el azul. Unos colores que pintan cándidos seres como palomas, cigüeñas, águilas o leones; animales a los que se miraba con recelo como cabras, cerdos, serpientes o monos; y criaturas mitológicas, léase grifos, arpías, centauros o basílicos.Algunas de estas representaciones se asoman a las paredes del Fadrique de Basilea, donde también se expone un ejemplar del facsímil editado por Siloé.«La mayor parte de los libros antiguos conservados son de temática religiosa, pero nosotros queremos tener un abanico que incluya lo científico, lo divulgativo y, sobre todo lo bello, como el Bestiario de Westminster, que, para nosotros, es de una belleza inusitada. Tiene un punto especial», ensalza orgulloso el editor Juan José García, que acaricia ahora entre las manos un proyecto anunciado hace dos años y que, añade, tiene un especial significado para su sello puesto que su primera apuesta fue también un bestiario, el único conservado en castellano, el de Juan de Austria, datado en el siglo XVI y conservado en el Monasterio de La Vid, presentado en 1998.JOSÉ MANUEL RODRÍGUEZ «El bestiario era la wikipedia de animales»
Después de quince años recorriendo las iglesias de la comunidad para la enciclopedia del románico de la Fundación Santa María la Real de Aguilar, el historiador José Manuel Rodríguez Montañés quedó fascinado por el universo esculpido en estas piedras sagradas, especialmente por los «bichos». Nació así una sensibilidad por la iconografía. Ayer se centró en la de los bestiarios en una charla en el Museo del Libro a colación de la inauguración de la muestra sobre el de Westminster.Pregunta- ¿De verdad eran los best seller de la época?Respuesta- Sin duda. Eran de los libros que tenía una mayor difusión. Comienzan a llamarse así en el siglo XII, pero en realidad estos volúmenes eran obras enciclopédicas con un contenido más científico, con ese tamiz del cristianismo, y con un corte poético. Después aparecen traducciones de estos bestiarios a la iconografía medieval tanto románica como gótica y se apartan de la idea inicial, tanto literaria como científica. Mantiene ese carácter moral pero muchas veces los propios artistas se dejan llevar y se quedan más como motivo ornamental. Los bestiarios ofrecen un campo abonado a la imaginación.P.- Su origen científico se va difuminando...R.- En cada caso concreto, el investigador debe determinar qué es lo que más pesa. El bestiario pretende una clasificación más tipológica, más enciclopédica, es, en términos actuales, la wikipedia de animales. P.- ¿Qué hace especial al de Westminster?R.- Su belleza, sin duda, es de una calidad excepcional, y que es de carácter único. Las piezas manuscritas hacen de cada obra un objeto único, copiable pero irrepetible. Ese sentido lo comparte con las esculturas.P.- ¿Quién era la criatura estrella?R.- El rey de los animales es el león, lo ha sido desde época antigua e incluso hoy permanece así dentro del imaginario colectivo actual. Después vendría el águila, que es la reina de las criaturas que vuelan.P.- ¿Quién es el príncipe destronado? ¿Quién ha perdido la fama ganada en el medievo?R.- Hay varios, sobre todo entre los fantásticos, como el basilisco. Los bestiarios asumían fauna real y fantástica sin diferencia. En el imaginario colectivo de un habitante de Burgos o de Soria de aquella época igual podía existir un dromedario que un grifo, porque no había visto ninguno de los dos. El grifo, híbrido entre león y águila, tuvo una presencia notable entre época antigua y medieval y ahora tienes que explicar qué es porque ha desaparecido. Lo mismo ocurre con la arpía o la sirena, la primera se mantiene como nombre despectivo, pero ha perdido parte del sentido tentador, de lujuria, que marcó su periplo medieval.