Nombramiento
«Hay que poner en valor los museos del vino»
El burgalés Rodrigo Burgos es el nuevo presidente de la asociación nacional que aglutina a 27 centros públicos y privados de esta temática
Rodrigo Burgos.-Ical
Rodrigo Burgos (Burgos, 1978) cambió el embriagador olor de los libros por el del también seductor de los caldos zamoranos hace tres años. Desde entonces conduce los pasos del Museo del Vino Pagos del Rey situado en Morales de Toro y desde hace unas semanas es el nuevo presidente de la Asociación de Museos del Vino de España, que aglutina a 27 instalaciones públicas y privadas nacidas al amparo del líquido elemento, ya sean auspiciadas por bodegas o por instituciones públicas.
Se pone al frente de la entidad con la meta clara: «Queremos poner en valor el trabajo colectivo que hacemos los museos del vino por la conservación, difusión y reivindicación de la cultura del vino en las distintas zonas de España. Buscamos que nos conozcan más como colectivo y como fuerza porque representamos a muchos centros privados y públicos, algunos con proyección internacional, como Vivanco».Para alcanzar este objetivo desarrollarán una estrategia de comunicación a nivel interno y externo con un calendario anual de acciones colectivas; mejorarán la visibilidad online con el desarrollo de una página web y la potenciación de la información en las redes sociales.«Tenemos muchos contenidos si sumamos lo que hacemos cada uno y debemos ser más activos», se propone.Esa agenda ya tiene reservados los días para el simposio que realizan todos los años, con una sede aún por determinar; y la celebración con actos diferenciadores del Día Europeo del Enoturismo, fijado el segundo fin de semana de noviembre, y el Internacional de los Museos, el 18 de mayo.El Centro de Interpretación de Arquitectura del Vino y el Museo del Vino Ribera del Duero de Aranda de Duero son los representantes burgaleses en el dibujo de estas instalaciones en la geografía nacional. Además de los burgaleses y el citado de Pagos del Rey, Castilla y León cuenta con el Aula de Interpretación de Mucientes (Valladolid), Museo del Vino de Valladolid en Peñafiel, Museo del Vino de Cacabelos (León) y el de Matarromera (Valbuena de Duero, Valladolid).Además del reto colectivo que tiene por delante, para Rodrigo Burgos colocarse al frente de este colectivo también es un desafío personal. ¡Quién dijo miedo! «Es una asociación muy sana, tiene un sentimiento de bien común muy potente por lo que si ya antes me movía cómodo (formaba parte de la junta directiva), ahora más», destaca este gestor cultural.