Burgos y su entorno, a pinceladas

El Premio Axa de Pintura Catedral de Burgos volvió a colorear la ciudad con caballetes, pinceles y pinturas pero, sobre todo, con artistas. Hasta doscientos cuarenta adultos provenientes de diversos puntos de la geografía española y de fuera de ella y más de sesenta niños participaron en el XXIII edición de este certamen que tiene como objetivo fomentar la cultura y obtener recursos para la rehabilitación de la Catedral de Burgos tras la venta de los cuadros finalistas.«Somos conscientes de que son obras que se hacen en unas horas y por esos buscamos la frescura y la impronta de lo que es prácticamente un boceto», explicó Carlos Cermeño, pintor, escultor y secretario de la Escuela de Arte y Superior de Diseño de Burgos, encargado de presidir el jurado, quien reconoció que designar a los ganadores del certamen «es siempre una tarea difícil porque tenemos poco tiempo».Aunque la Catedral es la gran protagonista de este premio, desde hace seis años el certamen amplió su concepto artístico a la Catedral y su entorno, y ese cambio ha supuesto que «cada vez más artistas se decanten por retratar otros rincones de nuestra ciudad», apunta Cermeño. Sin ir más lejos, en el año 2015 se hacía con el primer premio el pintor burgalés Sebastián Velasco con un obra sobre el mítico bar El Patillas. Entre las técnicas más usadas destaca el óleo sobre lienzo pero, «cada vez más, vemos artistas que se decantan por el collage o la acuarela», apuntó el presidente del jurado.En esto de seleccionar se estrenaba Manuel Castillero, ganador de la edición anterior del Premio Axa. «Este es un certamen tremendamente reconocido a nivel nacional e internacional, es un premio ‘mitológico’, el ‘Santo Grial’ de la pintura y conseguir entrar en la selección de los 40 mejores es un premio, ya ser un premiado es doblemente increíble, para mí fue una sorpresa y un honor enorme», apuntó Castillero quien aseguró que «la mejor forma de retratar la Catedral es hacerlo con sinceridad, elegir una vista que te llegue al corazón y luego saber plasmarla para transmitirla al espectador».Entre las calles del centro burgalés se pudieron ver ayer decenas de caballetes y pinceles en movimiento. Junto a la Villa de Madrid, con una vista privilegiada de la Catedral desde el Paseo del Espolón, se encontraba Miguel Montesinos, quien participaba en el certamen por segunda vez consecutiva. «Llevaba mucho tiempo queriendo participar en el concurso y daba la casualidad que siempre coincidía con concursos que hay por mi zona (Castellón) y tener que hacer 700 kilómetros para venir al final hacía que me quedara por allí, pero el año pasado me decidí a participar y después de esa experiencia he tenido que repetir».Más kilómetros aún ha recorrido Anne, quien participaba por primera en el certamen y ha venido desde una pequeña localidad al sur de Francia con un grupo de seis artistas más. «Hemos estado visitando Frías, es un pueblo bellísimo y ahora estamos participando en el certamen», apuntaba, mientras daba forma a la iglesia de La Merced.En El Espolón y junto al río se encontraba Eva Zaragoza, una burgalesa afincada en Madrid. La suya era una de las propuestas más originales y es que decidió plasmar la tarde anterior con sus amigas a las orillas del río burgalés. «La ciudad también la crean las personas», explicaba y aseguraba que esta «no es la primera vez que participo, es un certamen con mucho prestigio y un premio muy bueno».Compromiso

«Es una muestra del compromiso de Axa con Burgos y con su Catedral», explicó Jean Paul Rignault, presidente de la fundación, quien recordó que «la implicación de Axa con la Catedral continuará» aunque «deberemos buscar diferentes formas porque la Catedral está prácticamente rehabilitada y debemos innovar y encontrar nuevas ideas para continuar con esta unión». En este sentido, la fundación también tiene puestos sus ojos en el octavo centenario del monumento. «Sin duda colaboraremos con el evento y es que es una celebración muy importante».Los premiados se darán a conocer mañana y las cuarenta obras seleccionadas se expondrán en la Casa del Cordón del 13 de septiembre al 14 de octubre. Los artistas finalistas percibirán el 70% de los que se obtenga por su obra y el 30% restante se destinará directamente a la Seo burgalesa, un porcentaje al que la fundación Axa sumará otro 30%.